Griñán, que ayer inauguraba en la localidad cordobesa de Lucena el primer tramo de la Autovía del Olivar en la provincia de Córdoba y que une el municipio lucentino con Cabra, señaló a los periodistas que Andalucía no va a definir su "posición definitiva" sobre la financiación autonómica hasta que no se cierren todos los factores que componen dicho sistema.
Para cerrar todos estos puntos, recordó que está previsto que la próxima semana se reúna en Madrid la consejera de Economía y Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, a quien definió como "una persona muy competente y que lleva directamente el tema", con los responsables de financiación del Ministerio de Economía.
Por este motivo, señaló que la próxima semana será "muy importante" para debatir los factores que "todavía no están claros" en el nuevo modelo de financiación autonómica, si bien mostró su apoyo al documento que sobre esta cuestión presentó el Gobierno central en diciembre.
En su opinión, dicho documento es "muy importante", aunque en la actualidad se debe realizar la "traducción numérica" de ese "discurso literario".
Griñán señaló que esta "traducción numérica siempre plantea problemas", toda vez que hay que "ponderar y saber cómo funciona cada una de las variables que intervienen en el sistema".
En este sentido, afirmó que la Junta quiere saber "cómo se acomodan" cada una de estas variables a los "intereses legítimos de Andalucía", aunque señaló que el gobierno regional no va a pedir "ningún privilegio para Andalucía, sino que se mantenga la igualdad de todos los españoles".
De este modo, sostuvo que la postura del gobierno autonómico es que "lo que es bueno para Andalucía es lo bueno para España" y añadió que la Junta persigue "la igualdad de todos los españoles, vivan donde vivan".
Griñán aseguró que el nuevo modelo de financiación autonómica no ponderará la población en edad escolar por debajo del 20%, aunque añadió que aún están por "desentrañar" algunos puntos que "no están suficientemente claros".
Así, indicó que todavía se desconoce cómo se ponderan los siete grupos sanitarios, el fondo de cooperación y el de competitividad, del mismo modo que tampoco se conoce de cuántos recursos van a disponer cada uno de ellos.
Por este motivo, se mostró sorprendido de las declaraciones realizadas por el presidente del PP-A, Javier Arenas, quien dijo que "le consta" que el presidente andaluz sabe cuánto dinero llegará a Andalucía. En cambio, Griñán afirmó que sabe "lo que no va a ser", porque lo que conoce "todavía tiene que ser negociado para que sea de otra forma", es decir, que "todavía están abiertos muchos de los temas que configuran el sistema".
El PP quiere que Andalucía sea la que más gane
Por su parte, el secretario general del PP-A, Antonio Sanz, reiteró ayer el apoyo de su partido al presidente de la Junta para lograr "el mejor acuerdo" en el futuro modelo de financiación autonómica, pero le pidió que vote en contra si al final Andalucía no es la que más gana.
Sanz reiteró el ofrecimiento realizado ayer por el presidente del PP-A, Javier Arenas, de que este partido traslada su "total apoyo" a Griñán en la negociación con el Gobierno para lograr "el mejor acuerdo" para Andalucía en el futuro modelo de financiación autonómica.
No obstante, aclaró que el mejor acuerdo para Andalucía está "condicionado" a que esta comunidad sea la que más gane en el futuro sistema de financiación, y si al final esto no es así, el PP reclama al presidente de la Junta que "se oponga" a rubricar el mismo, y que inste al PSOE a votar en contra del sistema en el Congreso.
Tras recordar que el PSC ha anunciado que votaría en contra del mismo si el futuro modelo no se corresponden con las demandas de Cataluña, el dirigente del PP reiteró que desea al Gobierno andaluz el "mejor de los éxitos" en la negociación pero partiendo de la premisa de que Andalucía debe ser la que más gane.
Según el secretario general del PP-A, a Griñán "no le debería dar vergüenza" imitar a presidentes autonómicos como el gallego, Alberto Núñez Feijoo, quien reconoció tras la reunión con la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía, Elena Salgado, que "fue engañado" por el vicepresidente tercero, Manuel Chaves, en el encuentro que tuvo semanas atrás.
Sanz, que criticó el "desprecio constante" al que somete el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a Andalucía, lamentó que mientras que Salgado se reúne con los presidentes autonómicos, en el caso de Andalucía el contacto entre Griñán y la vicepresidenta segunda se limita a "una llamada telefónica".
Llamó la atención que mientras el consejero de Economía de Cataluña, Antoni Castell, se reúne con Salgado, en el caso andaluz la reunión es de la consejera de Economía y Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, con el secretario de Estado de Economía, Carlos Ocaña, lo que demuestra que el Gobierno "ningunea" a Andalucía.
"Exigimos una reunión de Griñán con Salgado", subrayó el dirigente del PP, quien añadió que el "serial de despropósitos" que ha cometido el Gobierno andaluz se va a traducir en que Andalucía va a pagar "un alto precio" debido a que la Junta "ha entregado la cuchara desde el primer día" en este asunto.
IU le pide que dé un puñetazo en la mesa de la negociación
Mientras, el coordinador andaluz de IU, Diego Valderas, reclamaba a Griñán que "de un puñetazo en la mesa" y plantee al Gobierno el mismo nivel de exigencia que Cataluña en la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica.
Valderas expresaba ayer en rueda de prensa su contrariedad con la forma en la que el Ministerio de Economía y la Junta están manteniendo los negociaciones previas a la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) para cerrar el futuro modelo financiero de la comunidades autónomas.
"La Junta contará con el apoyo de IU si el acuerdo supone que no se retrocede ni un milímetro en lo que dice el Estatuto de Autonomía y si Andalucía no queda por detrás de otras comunidades como puede ocurrir con Cataluña", advirtió.
No obstante, confesó estar cansado de que la Junta y el Gobierno estén "mareando la perdiz y jugando con opacidad con los intereses" de los andaluces, y opinó que por los "pocos" datos que están conociendo el resultado "no es positivo" para Andalucía.
Valderas alertó sobre la posibilidad de que "se intente engañar" a los andaluces para que otras comunidades sean "privilegiadas" con el nuevo sistema, e instó a Griñán a "dar un puñetazo" en la mesa de negociación con el Gobierno y a plantear igual nivel de exigencias que Cataluña.
"Además de en la población, el modelo debe estar basado en la solidaridad y en la convergencia, y no vamos a aceptar ni un milímetro de retroceso respeto al Estatuto", manifestó.
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