Así consta en el protocolo firmado ayer en la estación de Chamartín entre el ministro de Fomento, José Blanco, y la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, que desarrolla un plan de inversiones por valor de 784 millones de euros, de los que 479 millones de destinarán a adecuar las estaciones de ferrocarril.
Junto a la incorporación de nuevos trenes, preparados de fábrica para que puedan viajar personas con movilidad reducida, Renfe prevé adaptar otros 480 convoyes ya en circulación, con una inversión de 305 millones de euros.
La primera de esta reformas se licitará a principios del mes de julio por valor de 220 millones de euros.
El plan prevé la ampliación y consolidación del servicio Atendo, que presta asistencia a todos los viajeros con dificultades de movilidad.
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