Una semana después de que un trabajador municipal denunciara, a través de este medio, las "coacciones" recibidas por parte de la concejal de Izquierda Unida Carmen Álvarez a través de varios mensajes enviados por una red social, la formación ha salido al paso de las mismas, considerando que forman parte de una "campaña de acoso" contra la edil por haber solicitado información sobre las contrataciones y los ingresos y pagos realizados en las empresas municipales.
"La concejala Carmen Álvarez no ha coaccionado-amenazado a ningún trabajador", recoge la nota de prensa remitida a los medios de comunicación en la que aclara que a través de estos mensajes "aconsejó a un director de una empresa municipal, contratado a dedo por el PSOE de Sanlúcar, que ejerciera su responsabilidad con imparcialidad, que no entrara en el juego político compartiendo las mentiras dictadas por el partido que gobierna" en alusión a una nota de prensa en la que el Gobierno local advertía del riesgo de desaparición de los 100 puestos de trabajo de la residencia de ancianos de no elevarse las cuentas a las que IU, Podemos y PP votaron en contra. Desde IU alegan que "hay dos años para elevar las cuentas al registro mercantil", considerando que es "tiempo suficiente" para que el equipo de Gobierno de a la oposición lo que reclama: "transparencia en el gasto, los capítulos de gasto desglosados, detalles de proveedores, gastos e ingresos y participación de los consejeros en los presupuestos", entre otros asuntos. Además, aclaran, "los trabajadores de las empresas municipales y los del ayuntamiento pueden estar muy tranquilos porque IU jamás permitirá con sus votos ni un despido más".
En cuanto a la información publicada por este medio, IU advierte que será puesta en manos de su gabinete jurídico para que valore los juicios, los comentarios publicados y las palabras usadas contra la concejala y la formación.
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