Foro Ciudadano de Jerez mantiene su ronda semanal de encuentros con vecinos y vecinas de todas las barriadas y núcleo poblacionales del Jerez urbano y rural. En esta ocasión, miembros de esta organización política, con su candidato a la Alcaldía en las próximas elecciones municipales del 24 de mayo, Raúl Ramírez, se han desplazado a las barriadas La Alegría y Picadueña Baja para mantener sendos encuentros con sus representantes vecinales, Juan Flores y Juan Ojeda, respectivamente. Acompañado del coordinador y concejal de esta formación, Manuel Rosa, así como de la portavoz municipal, Rocío Montero, y otros miembros de Foro como Mariam Castellano y María José Torregrosa, el alcaldable se ha hecho eco de las quejas y reivindicaciones de los vecinos de estas zonas de la ciudad. Barriadas que, “como la inmensa mayoría, están dejadas a su suerte, sumidas en el abandono y la dejadez para garantizar el mantenimiento más mínimo”. Aquí, Raúl Ramírez ha planteado la necesidad de acometer un Plan Integral de Barriadas, recuperando la brigada de intervención rápida, dependiente del Área de Infraestructura, para atender en un plazo máximo de 24-48 horas muchas de las demandas vecinales que “pueden tener fácil respuesta con una inversión mínima para el Ayuntamiento”. “Es una medida inexcusable si gobernamos el Ayuntamiento a partir de junio que viene”, ha dicho.
“El equipo de gobierno actual, totalmente amortizado y que solo deja correr los días para desalojar el Ayuntamiento, ha mostrado una permanente descoordinación a lo largo de la legislatura, ya que no es normal que en todas las barriadas que visitamos prácticamente se reediten las mismas quejas vecinales, muchas de ellas tan simples como atender deficiencias en el alumbrado eléctrico, reposición de acerados, retirada de naranjas y poda de arbolado, reasfaltado… Todas estas demandas, por ejemplo, pertenecen a la barriada de Picadueña Baja, en la que también se denuncian problemas de señalización vertical y horizontal, hundimientos de calzada, problemas con la línea de transporte urbano cuya frecuencia de paso es muy elevada, y por supuesto el “gran problema” de la suciedad viaria. Durante la visita de Ramírez, que también estuvo en un encuentro con el colectivo de mujeres de El Pozo de la Víbora, éste ha mantenido que “el servicio de limpieza viaria, pese a que Pelayo prometió que Jerez iba a estar como una patena, es totalmente insuficiente; los contribuyentes y los vecinos en general se quejan con toda la razón del mundo porque hay barriadas de Jerez que están de pena”. En este sentido, asegura que “este es un problema que el gobierno del PP de la señora Pelayo es incapaz de atajar; no tiene capacidad para coordinar y mejorar un servicio para el que, obviamente, hay que destinar recursos públicos suficientes”.
Las demandas de la barriada La Alegría, ha dicho Ramírez, “prácticamente solo dependen de voluntad política, pero la señora Pelayo mira para otro lado ante los problemas de los vecinos, ya sea en relación con la lacra del paro o frente a unas exigencias mínimas y razonables de mantenimiento urbano de los núcleos de población del municipio”. En La Alegría, un barriada prácticamente en el centro de Jerez, se solicitan arreglos de puntos de luz, eliminar tocones, solicitan el cerramiento de un local abandonado en el bloque 33 y que es propiedad de un banco, piden rebajes de acerado en pasos de peatones, reponer globos de las farolas, así como pintar pasajes entre bloques 31 y 33, la restitución de acerado hundido en la entrada al centro de barrio. En este barriada, además, aún quedan dos bloques pendientes de culminar su rehabilitación integral, por lo que los representantes vecinales han demandado que “se reactive este tema cuanto antes” porque “es muy importante para mejorar la calidad de vida de quienes viven en La Alegría”.
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