El gobierno de Marruecos informó hoy del desmantelamiento del campamento de inmigrantes del monte Gurugú y anunció que va a proceder a "operaciones similares sistemáticas", según informó el Ministerio del Interior en un comunicado.
Estas operaciones tendrán como fin "evacuar todos los lugares ocupados ilegalmente por los inmigrantes que planifican tentativas de emigración irregular" sobre las ciudades de Ceuta y Melilla, aunque el comunicado no las cita.
El ministerio justifica el desmantelamiento del campamento del Gurugú -en el que han sido evacuadas 1250 personas hacia un destino desconocido- por "las muy precarias condiciones" en que vivían los inmigrantes y por la presencia entre ellos de redes de trata de personas.
"La operación ha permitido la liberación de varios inmigrantes, especialmente mujeres y niños, que estaban obligados a vivir dentro del bosque por las redes de traficantes y de trata de seres humanos", asegura el ministerio en referencia a los 36 mujeres y dos menores evacuados de allí según varias ONGs.
El desmantelamiento, según el departamento de Interior marroquí, "se desarrolló en buenas condiciones con participación de las autoridades administrativas locales y de diferentes cuerpos de seguridad, con supervisión de la Fiscalía.
Sin embargo, no da ningún detalle sobre el destino final de los 1.250 emigrantes contabilizados por las ONGs, que según estas organizaciones han sido enviados en convoyes de autobuses al menos a cuatro destinos distintos del país: Errachidia, Goulmima (ambas en el sureste), Yousufia (centro) y El Yadida (oeste).
Las ONGs temen que estos traslados, que califican de "ilegales", sean el preludio de operaciones masivas de deportación de inmigrantes a sus países de origen como las que se hicieron en 2005.
Además del campamento del Monte Gurugú, hay varios más establecidos en Uxda, Nador y las cercanías de Ceuta, que probablemente serán desmantelados en los próximos días.
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