La fe del Algeciras, sobre todo la de Willy, fue suficiente para que los albirrojos mantengan el pulso con el Gerena por el primer puesto. En un partido, en especial la primera mitad, sin brillo alguno por parte de los locales, el coraje derrochado en la recta final fue lo único que salvó al equipo albirrojo.
Como le suele ocurrir ante los rivales que salen a defenderse muy atrás en el Nuevo Mirador, el Algeciras se regodeó en la posesión durante la primera parte, pero no mordió. Solo una ocasión de Grabri no bastó para abrir la lata. El Cabecense, que había creado una también, por mediación de Vega, rompió el partido en el 36’ con el tanto de Reguera.
El castigo a esa gris primera mitad era quizás excesivo para los méritos del rival, pero sirvió para que el Algeciras recordara que sin mordiente no va a lograr nada este año, que no basta con dominar el balón y esperar que el rival se abra, porque eso no pasa en esta categoría.
En la segunda mitad las cosas incluso pudieron ponerse peor. Por un lado, Madruga le sacó a Joselu la primera en la primera jugada de la misma. El portero visitante se exhibió en este periodo.
Por otro, el Cabecense aprovechó los peores minutos del Algeciras, de desconcierto total, y Reguera, por dos veces, pudo haber dejado el partido visto para sentencia. Sin embargo, su primer intento se marchó fuera y el segundo lo repelió el larguero.
Entre una y otra Mere había hecho su segundo cambio, sacando a Willy. Al de La Perlita, que actuó de media punta, le sienta bien el papel de revulsivo que el técnico le ha otorgado esta campaña. Sus entradas al campo aportan ese toque de frescura y cierta anarquía que espolea a su equipo y desbarata al rival.
Melchor, en el 65' con dos intentos seguidos que sacó Madruga, quiso interpretar ese rol, pero estaba reservado para Willy, que en el 67’ estrelló un disparo en el poste.
Josemi salvó en el 82’ un remate de Francisco que finalizó una contra y, por poco, no sentenció.
En cambio, el Algeciras materializó su reacción en los últimos instantes, a modo de milagro navideño. Willy se sacó dos zapatazos lejanos para ello. El primero, en el 89’, con mucho efecto. Cuando el empate ya parecía valioso, en el añadido recogió un balón que había colgado él mismo y que anduvo de bota en bota hasta que el propio Willy lo mandó a la red de un fuerte disparo.
Ficha técnica:
Algeciras: Josemi, Máiquez, Víctor González, Berlanga, Antonio Merino (Antonio Jesús, 46'), Melchor, Manzano, Javi Chico, Iván (Willy, 60'), Gabri (Antoñito, 74') y Joselu.
Cabecense: Madruga, Iván, Cachana, Bucarat, Francis, Reguera (Francisco, 71'), Pipa, Guti, Marrufo, Vega (Dani, 92') y Gabriel (Carlos, 77').
Arbitro: Mañas Larrubia (Jaén). Amonestó a los locales Iván y Víctor González; y al visitante Bucarat.
Goles:
0-1 Reguera (m.36)
1-1 Willy (m.89)
2-1 Willy (m.92)
Incidencias: Partido de la 22ª jornada en el grupo X de Tercera División. Estadio Nuevo Mirador.
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