El secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad y único candidato a presidir el PP-A, Juan Manuel Moreno, ha admitido este jueves que no fue la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, quien le comunicó el apoyo de Génova a su entonces posible candidatura sino el vicesecretario de Organización, Carlos Floriano, y ha añadido que con ella hay una relación "cordial", al menos, en lo que a él respecta.
"No me llamó (ella) porque tiene una agenda complicada y el vicesecretario de organización suele encargarse habitualmente de este tipo de cosas ", ha dicho el futuro líder de los 'populares' andaluces. "Hay relación fluida, cordial y de amistad con la señora De Cospedal por mi parte y no hay ningún tipo de problema", ha añadido Moreno en una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press.
El 'popular' ha negado que en esa conversación telefónica Floriano le hubiera trasladado la decisión de Rajoy sino que lo que le propuso es que si a él le interesaba, le ilusionaba o estaba dispuesto a asumir ese reto que "tirase para delante" y ha subrayado que, por mucho que el presidente de su partido apunte a alguien como candidato, la decisión de dar el paso es personal.
"A mí me puede señalar el presidente pero si yo no quiero ser candidato no lo soy, nadie me pone una pistola; yo he tomado la decisión y la responsabilidad es claramente mía", ha incidido. Moreno, que también ha señalado que él acariciaba la idea de dirigir el PP-A "desde hace meses".
Por otro lado, en otra entrevista, en la Cadena Cope, ha admitido que aún no ha podido hablar con el presidente del partido y del Gobierno, Mariano Rajoy, una circunstancia a la que ha restado importancia ya que éste se encuentra de viaje en Turquía y no hay "nada grave o urgente" que le haya obligado a hablar con él. Moreno ha dicho que espera hacerlo a lo largo del día de hoy.
RAJOY ANIMÓ A QUE HUBIERA MÁS CANDIDATOS
Preguntado por si no sería más interesante que hubiera más candidatos, el aún secretario de Estado ha dicho que "por supuesto" y ha recordado que el propio Rajoy animó a ello. En ese sentido, ha dicho que los 90 avales que como mínimo hay que recoger en este primer paso son "nada" y que el que hasta ahora se preveía como más firme candidato, el secretario general y alcalde de Tomares, José Luis Sanz, podría haberlos reunido con facilidad.
"Era una opción absolutamente legítima y razonable y la única confrontación que suponía era la de las ideas y los proyectos", ha señalado Moreno, que ha recordado que "al final el señor Sanz, al que yo tengo un gran respeto y me une una amistad antigua, decidió no presentarse".
En esa línea, ha recordado que el PP reformó sus estatutos y dejó el mínimo de avales en una cifra muy baja por lo que "cualquier persona que tenga un grupito de amigos dentro del PP puede presentar una candidatura" y ha insistido en que a él el presidente no le ha "llamado" para decirle que tiene que ser el candidato.
"Yo he estado hablando, pensando y reflexionando con compañeros si era oportuno presentar la candidatura y una vez madurado y decidido, he tomado esa decisión libre y voluntariamente y, a partir de ahí, se ha construido una alternativa ya avalada porque muchos compañeros querían eso, pero ha habido seis días y se podía haber presentado cualquiera", ha dicho Moreno sobre el hecho de que ya haya recogido un número tan alto de avales.
"DESDRAMATIZAR" EL DEBATE
Por último, el candidato ha negado que el proceso de los últimos meses en torno al candidato pueda dejar alguna herida en el partido y ha dicho que "eso ya es pasado" y que los partidos, como "órganos vivos", tienen "debate, que es algo normal y que hay que desdramatizar". Además, ha dicho que no alberga "ningún miedo" a que este tiempo haya podido tensar las relaciones entre la dirección del partido y el Gobierno.
"Yo me represento a mí mismo y tomo mis propias decisiones, tengo amistad personal con miembros del Gobierno y del partido y creo que hay un proyecto de unidad y consenso", ha dicho.
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