La empresa papelera SCA ha anunciado el cierre de la fábrica de Carmona (Sevilla), donde trabajan 24 personas, toda vez, que, según la empresa, esta planta tiene unos costes logísticos "bastante elevados" y, según sus cálculos, el hecho de trasladar su producción a otras dos fábricas supondrá un ahorro anual cercano al millón de euros.
Los sindicatos CCOO, UGT y CGT han firmado con la dirección de la papelera SCA un preacuerdo la madrugada de este jueves que reduce de 150 a 134 los empleados de la planta de Mediona (Barcelona) afectados por el cierre de la línea de 'converting', que se encarga de fabricar servilletas y papel higiénico, y el preacuerdo permite que sean recolocados en otras fábricas del grupo.
Fuentes de la compañía han explicado a Europa Press que de estos 134 trabajadores un total de 30 se trasladarán a la planta de Valls (Barcelona), mientras que los 104 restantes se recolocarán en la de Allo (Navarra).
Fuentes sindicales han apuntado que no habrá prejubilaciones, y los trabajadores que descarten la opción de la recolocación tendrán derecho a una indemnización equivalente a un despido improcedente: 45 días por año con un tope de 42 mensualidades para los contratos anteriores a febrero de 2012, y 33 días por año con un tope de 24 mensualidades para los posteriores --no se podrán superar los 100.000 euros ni la cifra puede estar por debajo de los 10.000--.
Según las mismas fuentes, los empleados que decidan irse a Allo contarán con ayudas para el alquiler los cuatro primeros años --400 euros mensuales durante el primero, 300, 200 y 200--, 1.000 euros para la mudanza, otros 400 para la búsqueda de escuela en caso de que se tengan hijos y 950 euros si el trabajador va acompañado de su pareja para la búsqueda de trabajo, además de un plus por el traslado de 2.500 euros el primer año y 2.000 el segundo, este último ligado a quedarse en Allo.
Estos empleados tendrán un periodo de adaptación y prueba de 12 meses, y si quieren marcharse tendrán derecho a cobrar una indemnización a la que se le debe descontar las ayudas que ya hayan sido recibidas.
En cuanto a los trabajadores que opten por irse a la fábrica del grupo en Valls, contarán con ayudas para el transporte de alrededor de 200 euros durante 48 meses, según las mismas fuentes.
Este preacuerdo debe ratificarse en la asamblea de trabajadores que se celebrará este viernes, aunque fuentes sindicales han augurado que se aprobará puesto que cuenta con el visto bueno de los tres sindicatos: CCOO, UGT y CGT.
Desde SCA se han mostrado "satisfechos" por el preacuerdo y el diálogo mantenido con los representantes sindicales, y han destacado que el objetivo de la compañía ha sido el de intentar reducir el impacto de su decisión.
SCA anunció el 28 de octubre el cierre de la línea de 'converting' en Mediona --que emplea a 150 personas-- y el cierre de la fábrica de Carmona (Sevilla), donde trabajan 24 personas; en Mediona se conservará la línea de fabricación de papel, en la que trabajan entre 60 y 70 personas.
"COSTES LOGÍSTICOS ELEVADOS"
Fuentes de la compañía explicaron entonces a Europa Press que la planta de Mediona es "ineficiente" y presenta unos costes fijos por tonelada entre un 30 y un 40 por ciento por encima de los de otros centros productivos de SCA, y argumentaron que las instalaciones están obsoletas y presentan restricciones de espacio.
Según defendieron, la de Carmona tiene unos costes logísticos "bastante elevados" y, según sus cálculos, el hecho de trasladar su producción a las otras dos fábricas supondrá un ahorro anual cercano al millón de euros.
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