Arenas, durante su intervención ante el grupo parlamentario popular, consideró que es su “obligación” asistir a la reunión aunque “no es momento de fotos ni de escenas de sofá”, más aún cuando en una negociación la foto “debe dejarse para el final” si se quiere que prospere.
En esa misma obligación consideró que está Chaves, que debe cumplir enviándole un texto previo sobre los asuntos a tratar, documento que los populares sí que le remitirán y en el que defenderán un pacto social por el empleo, entre cuyos puntos está un “replanteamiento de todas las políticas activas de empleo”, que ahora no garantizan una formación adecuada de cara al futuro.
Arenas aprovechó para criticar, ante “el mayor esfuerzo de convocatoria” que realizará el PP con la marcha por el empleo del próximo domingo en Málaga, la “conducta antidemocrática” del PSOE por la “contraprogramación” que han organizado con el “desembarco de ministros y consejeros” por las distintas provincias. “No me importa”, señaló Arenas, pero consideró que “no está entre los hábitos democráticos el no respetar las convocatorias de otras formaciones políticas”.En su opinión, se trata de una conducta "poco democrática y lamentable" y que denota que el PSOE tiene un "estado de nervios bastante alejado de la serenidad y la tranquilidad".
Apuntó que la manifestación evidenciará "la Andalucía real en la calle y la oficial en torno a los ministros y a los consejeros", e ironizó al afirmar que "lo que nos faltaba es que los actos del PSOE se celebrasen bajo el lema del pleno empleo que todavía se prometía en el mes de agosto"
Preguntado sobre si es partidario de la reforma del mercado laboral, ha indicado que, de hacerse, debe ser fruto de un pacto entre sindicatos y empresarios, como ya ocurrió en 1997, cuando en su etapa como ministro de Trabajo, se alcanzó un acuerdo entre los agentes sociales que se tradujo en que los empresarios ganaron en flexibilidad y los trabajadores en estabilidad en el empleo.
Valderas reclama un diálogo directo con los sindicatos
Mientras, el coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, reclamó ayer "diálogo directo" con los sindicatos en lo que se refiere al próximo acuerdo de concertación social, al tiempo que solicitó a las organizaciones sindicales que se "activen con fuerza", ya que, a su juicio, "la mejor contribución al diálogo y a la concertación social tiene como instrumento la movilización", esperando que no se produzca un balance de “autocomplacencia”.
En rueda de prensa, en la que estuvo acompañado por el portavoz adjunto de IU, Pedro Vaquero, Valderas explicó que le ha remitido una carta a los sindicatos en la que le traslada las propuestas de la formación en esta materia, por lo que dijo esperar que se produzcan encuentros con las distintas formaciones sindicales. "Nuestra postura en esta cuestión no se reducirá al diálogo que mantendremos con Chaves", agregó.
También pidieron a los sindicatos que "no dejen la calle a la derecha", en relación a la manifestación que el PP-A tiene previsto realizar el próximo domingo en Málaga, una movilización a la que calificaron como "la rebelión de las corbatas".
En cuanto a la reunión con el presidente de la Junta, Manuel Chaves, Valderas apuntó que no se llegará a un acuerdo si no se plantea una transformación del modelo económico y una salida de izquierdas a la crisis "con una fuerte creación de empleo", que debe ser "objetivo prioritario" de cualquier tipo de medidas que se pongan en marcha desde el Gobierno.
El coordinador general de IULV-CA, que se mostró "dispuesto a escuchar y con capacidad para proponer", criticó que Chaves no le haya remitido un documento con las propuestas que pondrá encima de la mesa durante el citado encuentro. "Nosotros sí le mandamos una carta con 32 propuestas a corto, medio y largo plazo", agregó.
Entre las peticiones de IULV-CA, según explicó Valderas, se encuentran trazar un plan para la creación de empleo en Andalucía que devuelvan a la Comunidad en tres año a la situación de diciembre de 2007, el incremento en las inversiones públicas (36.000 millones en tres años), una mayor intervención pública en sectores estratégicos de la economía, una política fiscal progresista, la democratización del crédito y la creación una banca pública y del Instituto de Crédito Oficial de Andalucía.
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