El vicepresidente del área institucional del FC Barcelona, Carles Vilarrubí, ha admitido este viernes por la mañana la salida del portero Víctor Valdés, que ayer comunicó al club su decisión "irrevocable" de no renovar el contrato que finaliza en 2014, y ha negado que sustituirle vaya a ser "un extraordinario problema".
"Será un trabajo más, no un extraordinario problema. El Barcelona ha demostrado que tiene mecanismos y profesionales dentro del casa con suficiente solvencia como para resolver las bajas. Lo que ha pasado con Valdés no lo sacaría de contexto", aseguró en declaraciones a 'Els Matins' de TV3 recogidas por Europa Press.
Vilarrubí confirmó que el jueves por la tarde, en una reunión entre el club, el padre y el representante de Valdés, éstos informaron de la decisión "irrevocable" del guardameta de no renovar en 2014, por lo que el club estudia ahora su venta para el próximo verano, pues la otra solución sería dejarle ir libre al fin de la siguiente temporada.
"La dirección deportiva deberá encontrar un primer portero o la solución para cubrir la plaza de un extraordinario portero como ha sido Víctor Valdés, que ha representado lo que ha representado, y que ha compartido los éxitos de este equipo durante tantos años. Quiere irse y hay que respetarlo", manifestó.
Valdés, en su última comparecencia de prensa, comentó que se sentía siempre cuestionado como portero del FC Barcelona y que le gustaría conocer "nuevas culturas" y otros tipos de fútbol en el futuro. A sus 31 años, ha decidido que ya le ha llegado el momento de hacerlo.
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