“Pueden ustedes tratar de esconder con su palabrerío el asunto, pero por mucho que quieran liarlo al final hay un claro titular, y es que ustedes van a hacer perder otra inversión. Más bien son ustedes el Gobierno espanta-inversores”. Así de tajante se mostró la portavoz del PSOE rondeño, Teresa Valdenebro, durante el pleno celebrado este viernes en el Ayuntamiento, la segunda sesión extraordinaria en una semana, a la que el equipo de Gobierno llevó el polémico asunto de la guardería de la Cruz de San Jorge.
Hace semanas lo habían anunciado, e incluso amenazaron con ello, los concejales de Obras y Educación, Daniel Harillo y Fernando Corrales, auténticos arietes del equipo de Gobierno contra la Junta. El PSOE, ya entonces, lamentó la política de enfrentamiento abierta por el Gobierno municipal contra la administración regional; no obstante, fue cuando ambos ediles, de nuevo Harillo y Corrales, anunciaron que la anunciada intención no era una simple amenaza, sino que se llevaría a cabo, cuando también el PSOE exigió al Gobierno que buscase una solución alternativa. El pleno de este viernes, sin embargo, certificó que no existe alternativa alguna, y que Rondase quedará sin guardería pública.
“La propia empresa nos ha agradecido que renunciemos, porque para ellos sería una verdadera ruina hacer la obra y que no les pagásemos”, declaró Daniel Harillo, quien dijo que el equipo de Gobierno es “consecuente” al tomar esta decisión. “Dicen ustedes que es por culpa de la Junta, pero no cuentan que ha sido el Gobierno del señor Rajoy quien ha suprimido el plan Educa3, que venía pagando estas infraestructuras. Pese a eso, la Junta ha mantenido su compromiso”, defendió Teresa Valdenebro, la portavoz del PSOE, cuyo discurso fue duramente contestado por Daniel Harillo: “Puestos a hablar de política nacional, aunque a los andalucistas no nos gusta, digan ustedes que fue Zapatero quien realmente arruinó el país con sus planes de empleo”, afirmó. Y Valdenebro respondió con similar contundencia: “Para no gustarle la política nacional, defiende usted muy bien al PP, tanto que parece más un concejal del PP que un concejal andalucista”, reprochó la socialista, quien también ironizó recordando a Harillo que “para no gustarle tampoco los planes de empleo del PSOE, bien que siguen ustedes haciéndose fotos con las obras que sólo han tenido que inaugurar gracias a esos planes”.
Al final, con sus votos mayoritarios, PP y PA lograron sacar adelante no sólo la renuncia a la subvención, sino también la resolución del contrato con la empresa que iba a construir la guardería de la Cruz de San Jorge. El PSOE votó contra la decisión y lamentó que el equipo de Gobierno, de nuevo, haya “cocido en soledad de su mayoría” este asunto “sin pedir opinión o posibles soluciones a la oposición”, dijo Valdenebro
LOS SILLONES DE IU, VACÍOS
El pleno de este viernes mostró una insólita imagen en el salón de sesiones del Ayuntamiento, la de los vacíos sillones de los concejales de Izquierda Unida, que plantaron al equipo de Gobierno tras convocarse un segundo pleno extraordinario en sólo una semana, coincidiendo con una reunión que los concejales de IU habían comprometido con uno de sus nuevos cargos en la Junta para tratar el asunto de las ELA de Montecorto y Serrato. IU dijo antes del pleno que no se puede convocar una sesión sin informar de los asuntos con suficiente tiempo de antelación a la oposición y sin contar con su agenda.
El PSOE lamentó en el inicio del pleno que “la voz de quienes votaron a IU no está representada por sus malas formas”, criticó Teresa Valdenebro al equipo de Gobierno.
La alcaldesa, Mari Paz Fernández, contestó duramente atacando a IU por, según la alcaldesa, una “jugarreta política”, molesta Fernández porque los ediles rondeños hubieran cerrado una reunión con un alto cargo de la Junta “sin que podamos asistir los demás concejales, como acordó el pleno”, dijo.
Durante el debate sobre la licitación del arrendamiento de un local municipal, el PSOE llegó a abstenerse por no haber podido estudiar a fondo el expediente.
A CONCURSO LA PISCINA POR LA INCOMPATIBILIDAD DE LÓPEZ
El pleno aprobó este viernes el inicio del expediente y el pliego de condiciones para el arrendamiento de la piscina municipal, tras que el concejal popular Manuel López haya tenido que renunciar a la misma al haberse dictaminado la incompatibilidad de su cargo con dicho arrendamiento familiar.
“Nos alegramos de que después de un año se apruebe el pliego, y nos preguntamos qué hubiese pasado si hubiera sido al revés. Sólo Dios sabrá qué hubieran dicho ustedes”, dijo Teresa Valdenebro, la portavoz del PSOE. Con todo, los socialistas se abstuvieron, al no disponer del informe del secretario con dicha resolución de incompatibilidad: “La hemos pedido por escrito y siguen sin darnos el documento”, dijo Valdenebro, quien concluyó que “dicha incompatibilidad se debió haber resuelto desde el minuto uno”.
Fue en junio pasado cuando la alcaldesa informó de dicha resolución; el anuncio, hecho de pasadas al inicio de un pleno, no logró acallar las críticas del PSOE, que se preguntó cómo la Secretaría del Ayuntamiento había tardado todo un año en emitir su informe cuando sólo pasaron unos días, cuando comenzó la nueva legislatura, para que se dictara la incompatibilidad del socialista Rubén Morales como concejal y trabajador de la empresa municipal SOMUCSA. Los socialistas no han dejado de preguntarse a qué se debió tal demora en el caso de Manuel López.
FERNÁNDEZ LLAMA A LA POLICÍA PARA EXPULSAR A OROZO
El concejal socialista Alberto Orozco quiso reprochar durante el pleno a Mari Paz Fernández que ésta, según dijo, no cumpla con su papel de presidenta de las sesiones, utilizando su posición únicamente para atacar políticamente al PSOE, al poder cerrar siempre los debates Mari Paz Fernández. Orozco lamentó que la regidora utilice siempre y sin excepciones dicho turno para atacar ferozmente a los socialistas, sin permitir, porque así está previsto en la ley, que haya ninguna réplica. Como dichos reproches se producían justamente en uno de esos turnos, y precisamente durante un fortísimo ataque de Fernández, la alcaldesa, al entender que no estaba siendo respetada en su tiempo, llegó a llamar a la Policía para que se llevase al concejal del PSOE del pleno. Finalmente Orozco, que llegó a levantarse de su sillón, se quedó en la sesión.
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