Los Mossos d'Esquadra han imputado a 63 personas, incluida la jefa de la trama que se encuentra en búsqueda y captura, como presuntos autores de un delito de estafa continuada de venta de productos electrónicos por Internet, según ha informado la policía catalana.
La investigación se inició hace cinco meses cuando una arrendataria informó a la policía de que una inquilina había abandonado el domicilio, pero que en el interior se había dejado una gran cantidad de libretas bancarias y objetos diversos sospechosos.
Los Mossos d'Esquadra contabilizaron en el interior del piso 61 libretas bancarias, 49 tarjetas de telefonía activadas y 32 tarjetas SIM, 30 tarjetas wifi de un centro comercial de Barcelona y dos ordenadores.
La policía abrió una investigación que vinculaba a la inquilina como la presunta jefa de un delito de estafa continuada a través de Internet por simular vender productos electrónicos en páginas web y apropiarse del dinero de una venta ficticia, sin llegar a entregar nunca los productos.
La presunta autora necesitaba colaboradores para llevar a cabo la estafa, y se aprovechaba de diversos portales de Internet de búsqueda de trabajo donde colgaba anuncios pidiendo trabajadores a los que ofrecía 300 euros, para hacer ingresos en su libreta y hacer transacciones económicas que les harían ganar beneficios.
El requisito para cobrar cada semana era que abriesen una cuenta y diesen a la jefa de la trama la libreta y el número secreto para que ella pudiese realizar las operaciones; los intermediarios nunca recibieron el dinero y muchos de ellos han denunciado los hechos cuando fueron alertados por los bancos que en sus cuentas se hacían movimientos sospechosos, y otros denunciaron la pérdida o robo de sus libretas.
La imputada ofrecía productos electrónicos y de telefonía a un precio por debajo del mercado, y en el anuncio daba un número de teléfono que estaba vinculado a una línea de prepago; cuando el comprador se ponía en contacto le pedía que le informase cuando ingresara el dinero en una de las cuentas para enviarle el producto.
Cuando el comprado le informaba, ella se dirigía al banco, retiraba el dinero y nunca entregaba el producto. La investigación ha permitido concluir que entre octubre y diciembre de 2011 se han realizado con este 'modus operandi' 68.273 euros con un total de 40 víctimas identificadas y repartidas por toda España.
Los imputados, la mayoría de origen sudamericano, ya han sido identificados, y la presunta autora de la estafa se encuentra en busca y captura a la espera de ser detenida.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es