La actriz canaria Blanca Rodríguez y el actor y director teatral José María Pou leyeron ayer el acta con los nombres de los candidatos a estos galardones, que organiza la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) para distinguir los mejores espectáculos de la temporada a través de 23 categorías a concurso –además de los cuatro premios que otorga la organización y el de la crítica–.
Otros de los montajes que más candidaturas aglutinan son De cabeza (6), de la coreógrafa y Premio Nacional de Danza Teresa Nieto, y Argelino, servidor de dos amos, de la compañía Animalario y el Teatro de la Abadía, y Barroco, del director esloveno Tomaz Pandur y protagonizada por Blanca Portillo, con 5 cada una.
Tirant lo Blanc es una adaptación del clásico de la novela de caballerías de Joanot Martorell (de 2.000 páginas), que Calixto Bieito puso en escena con su compañía del Teatro Romea y el músico Carles Santos.
Este montaje opta a los siguientes premios: mejor adaptación de obra teatral, mejor composición musical para espectáculo escénica, mejor director musical, mejor figurinista, mejor iluminación, mejor actriz de reparto (Roser Camí y Victoria Pagés) y mejor actor de reparto (Lluis Villanueva).
De cabeza es candidata en las categorías más destacadas de danza: mejor espectáculo, mejor coreografía, mejor intérprete femenina (para Teresa Nieto y Vanessa Medina) y masculino (para Jesús Caramés y Manuel Liñan).
Argelino, servidor de dos amos es la adaptación del clásico del italiano Carlo Goldoni, titulado Arlequino, servidor de dos amos, que el director Andrés Lima y la compañía Animalario, largamente galardonada en los últimos años en estos premios, convirtió en una sátira del mundo actual.
Este montaje opta en las categorías más importantes: premio al mejor espectáculo de teatro, para el que compite con 2666 y Barroco; y mejor director de escena, en el que Andrés Lima se medirá con Alex Rigola por 2666, Alfredo Sanzol por Sí, pero no lo soy, y Carol López por Germanes.
Asimismo, Argelino, servidor de dos amos compite en la categoría de mejor adaptación teatral (Alberto San Juan), al mejor protagonista (Javier Gutiérrez) y al mejor empresario o productor privado (Animalario).
A mejor actor protagonista rivalizan también el argentino Alfredo Alcón, por Rey Lear, una producción del Centro Dramático Nacional dirigida por Gerardo Vera, y Asier Etxeandia, por Barroco, una producción del Teatro Fernán Gómez, inspirada en dos obras literarias: Las amistades peligrosas, de Laclos, y Cuarteto, de Müller.
En la categoría femenina a la mejor actriz, las candidatas son Blanca Portillo, por Barroco, Carmen Machi (La tortuga de Darwin) y Vicky Peña (Apres moi, le deluge).
Además de las categorías de mejor espectáculo de teatro, mejor actriz y mejor actor, Barroco ha sido elegida para competir en las de mejor figurinista y diseño de iluminación.
La gala de los Premios Max quiere reclamar la atención del ciudadano, para que recuerde que sin artes escénicas no se puede construir una sociedad civil con cohesión, dijo Eduardo Bautista, presidente del Consejo de Dirección de la SGAE, quien ha adelantado que su objetivo es “ir más allá” y que a lo largo de todo el año haya actividades relacionadas con estos galardones.
Previa a la gala –que por primera vez se celebrará en una isla y que en su XIII edición viajará a Baleares–, tendrá lugar la fiesta de finalistas, en la que se premia a todos los concurrentes con los maximinos, una réplica en miniatura de la manzana plateada con antifaz dorado, que diseñó el artista Joan Brossa para estos trofeos.
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