Los policías se desplazaron a la casa tras recibir una llamada a las 6,40 horas en la que les informaban de que una mujer estaba de parto y que el bebé ya asomaba la cabeza. Hasta el lugar se trasladaron primero dos agentes, a los que después se sumaron tres patrulleros más.
Cuando llegaron los agentes, la mujer estaba en el portal del bloque del piso en el que reside asistida por su suegra, que intentaba retener al bebé.
Los agentes, que recibieron en todo momento instrucciones telefónicas del Servicio de Emergencias 061, asistieron al final del parto, recogieron al bebé y efectuaron las maniobras pertinentes para que llorase, tras lo cual lo depositaron sobre el pecho de su madre y lo envolvieron en mantas.
Una vez que llegaron los servicios médicos cortaron el cordón umbilical de la niña, que según sus padres se va a llamar Claudia, y se trasladó a ambas hasta el Centro Hospitalario de Alta Resolución de Especialidades.
Uno de los agentes fue quien trasladó al bebé en sus brazos para que no perdiera calor, y tanto la madre como su hija se encuentran bien y han sido trasladadas a un centro hospitalario de Sevilla.
No es la primera vez que los agentes de la Policía Local de Utrera atienden un parto, lo que ha ocurrido al menos en dos ocasiones más.
Los policías que asistieron al parto han dicho que la experiencia ha sido “preciosa, para vivirla”, y han afirmado que ha sido “muy gratificante” ayudar a la madre y a su hija, que han definido como “muy bonita y muy espabilada”.
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