Según el informe del médico que atiende a la pequeña en Ecuador, Alexandra presenta “un diagnóstico de síndrome convulsivo, discapacidad intelectual de un 70 por ciento, epilepsia, un quiste cerebral y anemia que necesita de un tratamiento continuado”. “Ahora la está cuidando mi madre pero ella es mayor. Yo solo pido la solidaridad de las personas o de las instituciones para que me ayuden a ayudar a mi hija”, explica la madre. Con la ayuda de vecinos y vecinas de la ciudad, María espera poder afrontar este mes alguno de los gastos del tratamiento, así ha hecho público un teléfono y un número de cuenta para apoyarles.
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