La acería repasó que “se evaluaron varias posibles medidas, pero ésta era la que todos veíamos como la mejor” de cara al empleo.
La compañía también explicó que considera que su plantilla está actualmente “ajustada” a sus necesidades, por lo que desechó futuros despidos tras el ERTE. “En cuanto los pedidos vuelvan a la normalidad necesitaremos de toda la plantilla”, apuntan desde la acería.
Sobre la valoración del delegado provincial de Empleo, Juan Bouza, respecto a que el expediente podría suspenderse en octubre tras un previsible aumento de los pedidos, la compañía se limitó a contestar que “es pronto para decirlo”.
En esta línea, Acerinox recalcó que “la visibilidad del negocio es corta. Ojalá pudiéramos cancelar el expediente cuanto antes y que todo volviera a la normalidad”.
Aplicación
La empresa puso ayer en marcha el expediente suspensivo en algunas de sus unidades, situación que se repetirá desde hoy en adelante en las diferentes áreas.
En principio, en esta primera etapa, los paros programados afectarán a laminación en caliente y a parte de laminación en frío. Ambos departamentos retomarán la actividad el próximo día 20. Mientras, Acería no necesitará de acudir al ERTE en julio.
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