Desde las 17:30 horas, los voluntarios prepararon las bolsas de comida preparadas con alimentos "de acuerdo con sus creencias religiosas", por lo que se ha evitado cualquier derivado del cerdo ante la mayoría de personas de religión musulmana que existen en el municipio.
No obstante, Mora ha lamentado que la previsiones se han quedado cortas, y muchos inmigrantes no pudieron tener su bolsa de comida, aunque sí compartieron las de sus compañeros.
Pollo asado, champiñones, langostinos y queso han formado parte del menú de la cena, que volverá a repetirse la noche de Nochevieja, aunque en esta ocasión serán 90 inmigrantes los que cenarán gratis en su propio restaurante, en la playa onubense de La Antilla.
"Lo pasé muy mal de joven, y no quiero, mientras pueda, que nadie sepa lo que es quedarse sin cenar en Navidad", ha señalado Mora al explicar en qué consiste su actividad solidaria.
El alcalde de la localidad, Manuel Andrés González, del Partido Popular, dirigentes del PSOE local y voluntarios de Cáritas ayudaron a Mora a repartir los alimentos y bebidas, hasta que han terminado su trabajo poco antes de las 20:30 horas.
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