Según las fuentes, Cajasol se incorporará a Banca Cívica con “un peso importante” dentro del grupo, de forma que “tendrá la sede social en Sevilla”. Asimismo, Banca Cívica estará copresidida por Pulido y por Enrique Goñi, actual presidente del SIP, de forma que “habrá un coliderazgo en el proyecto de Pulido y Goñi”.
Agregaron que Cajasol tendrá “mayoría de bloqueo”, de forma que “cualquier decisión de Banca Cívica deberá tener la aprobación y el visto bueno de Cajasol”, lo cual “demuestra la importancia de la caja andaluza en el grupo”.
Consideraron que la entrada de la caja andaluza “será algo positivo para Grupo Banca Cívica, pues le da un tamaño muy importante para acometer proyectos en Andalucía y fuera de ella”. Además destacaron que “la solvencia de Cajasol, por encima del 14%, va a fortalecer la solvencia del grupo”.
En la misma línea resaltaron que, según el plan de negocio, el ajuste laboral que se deberá acometer “sería menos de una cuarta parte de una hipotética fusión ente Unicaja y Cajasol”. Además apuntaron que “habrá la mitad de prejubilaciones y salida de trabajadores que si Cajasol permaneciera sola”.
Las fuentes subrayaron que con esta operación “no habrá solapamiento de oficinas” y constituye “una integración muy buena, muy sana y muy positiva para Andalucía”.
Por su parte, fuentes oficiales de Cajasol no quisieron confirmar esta operación, mientras que fuentes de la Junta indicaron que no se pronunciarán hasta que no exista confirmación oficial por parte de la entidad.
Precisamente, este jueves se ha conocido que Unicaja y Cajasol prevén no seguir con la idea la fusión entre ambas cajas, según han confirmado fuentes del sector, después de que ambas entidades emprendieran sendos estudios sobre su viabilidad. Ambas cajas habrían desistido al no lograr un acuerdo para alcanzar “una fusión paritaria y entre iguales entre ambas cajas”, según fuentes financieras.
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