La Fiscalía ha pedido 18 años de prisión para un hombre, que será enjuiciado por un jurado popular, por el asesinato de un anciano de 83 años, cuyo cadáver fue encontrado hace un año en un vertedero ilegal de Almerimar, en el término El Ejido (Almería), tras permanecer desaparecido durante 18 días.
La calificación del fiscal, consultada por EFE, sostiene que el procesado conocía a la víctima, ya que había intervenido como intermediario en la adquisición y posterior venta de un vehículo por parte del fallecido.
La víctima sospechaba que había sido engañado por el acusado en el precio de estas operaciones, así como en el posible otorgamiento de compraventa a su nombre, sin su firma y su consentimiento.
El fiscal mantiene que, debido a esto, pidió explicaciones al acusado, quien le habría asegurado que "todo era correcto".
El 2 de diciembre de 2021, el acusado habría llamado a la víctima sobre las 19:17 horas, tras lo que lo habría recogido en su automóvil con la excusa de desplazarse a una gestoría para convencerlo de la legalidad de la operación con documentos.
"Simulando que quería aclarar las cosas", se dirigió con la víctima a la puerta de la gestoría, que permanecía cerrada.
De esta forma, regresaron con el perjudicado sentado en el asiento del copiloto y recogieron al hijo del acusado, tras lo que se marchó a la localidad de Santa María del Águila, donde este último pasajero se bajó.
Cuando se quedaron solos, asegura el fiscal, el acusado se dirigió con él a una zona desconocida en las inmediaciones de Santa María del Águila, en la cual no existen viviendas sino invernaderos, ni posibilidad de ser localizado por personas que sepudieran encontrar en el lugar.
En un momento determinado, de forma sorpresiva e inopinada, con la intención de ocasionarle la muerte, prevaliéndose de su avanzada edad y sus dificultades físicas, el acusado, con el uso de algún tipo de objeto o herramienta, propinó a la víctima un fuerte golpe en la cabeza, según la Fiscalía.
La víctima sufrió una fractura por estallido con puntos de impacto en la región frontal y doble trayectoria, hacia la región occipital que desembocó en su muerte por un traumatismo cráneo-encefálico y destrucción de centros nerviosos superiores.
Tras esto, el acusado habría ocultado el cuerpo en la carretera que conduce a Almerimar, no sin antes cubrirle el rostro con una piedra de grandes dimensiones.
El cadáver no fue localizado hasta las 12:00 horas del día 21 de diciembre de 2021 en avanzado estado de descomposición.
Por estos hechos, el fiscal atribuye al acusado un delito de asesinato, por el que solicita una pena de 18 años de prisión, y que indemnice a los herederos directos de la víctima con 120.000 euros.
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