Sánchez Luque, quien afronta el final de su mandato de dos años, sostuvo, en una entrevista con la Agencia Efe, que el acceso a los recursos sanitarios “a veces se trivializa” y se llegan a ofrecer tratamientos médicos y farmacológicos a problemas “cuya solución no está en el médico sino en la propia sociedad”.
“Algunas consultas de primaria se han convertido en algo parecido a ir de compras y hay que inculcar una política de educación de los pacientes para hacer un uso racional no solo de los fármacos, sino de las pruebas complementarias o de las derivaciones a especialistas”, añadió.
En su opinión, los grandes partidos tienen reparos “a decir que el gasto sanitario tiene un límite pero tensar tanto la cuerda puede llevar a que soluciones finales como el copago se planteen; parece que todo es demandar y existe un reparo a decir: bueno, esto tiene un límite”.
Por ello, abogó por que se implementen “herramientas” de control del gasto sanitario “para que realmente evitemos fórmulas como el copago”.
De la actual crisis, el presidente del CACM resaltó que estos profesionales no sólo la sufren con el recorte de plazas y de sus nóminas, “que son la única fuente de ingresos para la mayoría” sino en sus consultas donde cada vez ven “más problemas de ansiedad, depresión, angustia, trastornos de disfunción familiar, que son un sufrimiento para quien escucha con un bata banca”.
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