Según la Confederación de Comercio de Andalucía, se prevé que la facturación en las rebajas de verano alcance este año 285 ó 290 millones de euros, igual que el año anterior.
Para dar salida a los productos acumulados por una mala campaña de primavera-verano los comercios empezarán desde el primer día con descuentos generalizados del cincuenta por ciento, que se irán incrementando hasta alcanzar un setenta por ciento a medida que avance la campaña.
“El sector está sufriendo la peor crisis de consumo de su historia, que se verá agravada por las medidas de carácter fiscal” del gobierno y que tendrán un efecto negativo en el consumo, según el secretario de CECA, José Guerrero Huesca.
Por ello, el comercio tendrá que “hacer aún mayores ajustes, lo que obligará, en algunos casos, a reducir plantilla e incluso cerrar el negocio”, ha advertido José Guerrero.
Los inspectores de Consumo de la Consejería de Salud realizarán a partir de mañana, cuando comienzan las rebajas de verano, un mínimo de 650 controles en establecimientos de toda Andalucía para comprobar si se respetan los derechos de los usuarios.
La Junta comienza hoy su campaña de inspección para garantizar los derechos de los consumidores andaluces en este periodo especial de ventas, ha informado la Consejería del ramo en un comunicado.
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