Las nuevas unidades, que no conllevarán incremento de personal pues sólo implicará la reasignación de funcionarios con “perfil y vocación” a estos servicios, estarán coordinadas por la Unidad de Igualdad de Género del Instituto Andaluz de la Mujer, la única que funcionaba hasta ahora desde 2002. Las unidades se adscribirán a los órganos directivos que ejerzan funciones de carácter horizontal, abarcando a las agencias administrativas.
Las Unidades de Igualdad de Género, que estarán operativas en los próximos meses, reafirman la apuesta por la equidad y ofrecen herramientas para garantizar esta “transversalidad”, según Mar Moreno, que apuntó que contribuirán “a que las políticas de igualdad se desarrollen con los mismos vectores en todas las consejerías”.
Moreno situó también estos nuevos servicios administrativos en las actuaciones desarrolladas en Andalucía para integrar “esta visión de igualdad en las políticas de la Junta”.
En referencia a las críticas del secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, que apuntó que “no habrá igualdad sino hay empleo en igualdad”, apuntando que lo que se necesita es “más inspección de trabajo para que negocien planes de igualdad y que se haga cumplir la legislación laboral”, Moreno apuntó que coincide en la reflexión.
Así, aseguro que queda un trabajo “muy intenso” y “notable” en el ámbito laboral, aunque situó el trabajo de estas unidades en el esfuerzo por continuar “removiendo los obstáculos” y promocionar la igualdad en todas las políticas de la Junta.
Con el objetivo de impulsar y coordinar las medidas de igualdad entre mujeres y hombres, las unidades ejercerán, entre otras funciones, las de asesorar en la elaboración del informe de evaluación de impacto de género que se exige para la elaboración de normas y planes.
Realizarán el análisis y control de las estadísticas oficiales de cada departamento desde esta perspectiva; impulsarán iniciativas de formación y de conciliación de la vida laboral y familiar dirigidas al personal de la Administración autonómica y llevarán a cabo el seguimiento de los planes y programas para la igualdad que desarrolla cada año la Junta de Andalucía.
La integración de la perspectiva de género en las distintas políticas sectoriales de la Junta, objetivo principal de las nuevas unidades, cuenta con iniciativas como la realización de informes para evaluar el impacto que sobre la igualdad de oportunidades.
Andalucía es actualmente la única comunidad autónoma española que incorpora el informe de impacto de género en sus cuentas públicas, lo que -según Moreno- aporta una metodología que implica a todos los gestores presupuestarios y vincula con el objetivo de igualdad a todas las políticas.
En el actual presupuesto, los programas denominados G+ suponen el 57,7% del total.
Otro de los cometidos de las nuevas unidades será el impulso y seguimiento en cada consejería del primer Plan Estratégico para la Igualdad de Mujeres y Hombres en Andalucía, aprobado el pasado mes de enero por el Consejo de Gobierno con una dotación de 2.978,5 millones de euros en el periodo 2010-2013.
El Plan Estratégico recoge 316 medidas para eliminar las discriminaciones por razón de sexo en los ámbitos laboral, educativo, cultural y social que aún se registran en la comunidad autónoma.
La tasa de actividad femenina está 22 puntos por debajo de la de los hombres pese al incremento de 13 puntos (del 35% al 48%) experimentado en la última década, lo que se suma al hecho de que las mujeres andaluzas ganan al año una media de 5.400 euros menos que los hombres.
Además, en torno al 80% de las mujeres que trabajan se ocupan también de las labores del hogar, frente al 36% de los hombres empleados, y soportan mayores situaciones de dependencia a partir de los 55 años.
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