Según informaron a Europa Press fuentes judiciales, en la tercera y última sesión que se celebró ayer, testificó uno de los peritos y se elevaron a definitivas las conclusiones tanto de la acusación como de las defensas.
La primera sesión tuvo lugar la pasada semana, cuando los menores ofrecieron "cinco versiones distintas y apuntaron contradicciones" pero todos "se situaron en el lugar de los hechos".
Por su parte, Bárbara Royo, la abogada de la familia de la víctima aseguró en declaraciones a los periodistas antes de comenzar la segunda sesión del juicio, que no está conforme con la libertad de dos de los menores, una vez cumplido el plazo de internamiento cautelar de nueve meses.
En cuanto a la situación de los menores, la letrada precisó que dos de ellos se encuentran en una convivencia con un grupo educativo en una entidad pública, es decir en una comunidad terapéutica; otro de ellos mantiene la libertad vigilada que mantenía; en cuanto al otro, señaló que se ha modificado el internamiento por una libertad provisional, pero con una orden de alejamiento de cien metros de la víctima y su entorno, y el quinto menor seguirá ingresado en un centro de menores cumpliendo otra causa pendiente.
Royo señaló que espera "la condena de estos chicos en la medida que se solicitan", es decir las penas de internamiento de cinco a ocho años según la edad, seguido de una libertad vigilada, de una orden de alejamiento y de una indemnización civil.
Los hechos se remontan al pasado verano cuando estos menores presuntamente agredieron sexualmente a la niña durante la madrugada del 19 de julio en una zona de la playa, cerca del recinto ferial de esta misma localidad, coincidiendo con las fiestas del Carmen.
La madre de la niña puso la denuncia ese mismo día por la tarde en el cuartel de la Guardia Civil de Isla Cristina y de inmediato la menor fue trasladada al hospital Infanta Elena de Huelva, donde se le realizó un examen médico, que confirmó las agresiones sexuales.
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