La Policía Nacional ha detenido a diez personas, pertenecientes a un clan familiar conocido por el tráfico de drogas en la localidad sevillana de Morón de la Frontera y comarcas colindantes, por blanqueo de capitales consistente en insuflar los beneficios generados por las explotaciones agrícolas de sus tierras.
Este clan familiar, conocido en la localidad debido a que varios de ellos tienen antecedentes por tráfico de drogas, había mostrado desde 2016 un incremento patrimonial que no concordaba con la explotación de las fincas rústicas que sus miembros tienen en propiedad, motivo por el cual se iniciaron las pesquisas policiales, informa la Policía en una nota.
Agentes de la Brigada Provincial de Policía Judicial iniciaron la investigación en junio de 2021 con la emisión de un informe al Juzgado de Instrucción 2 de Morón de la Frontera, donde se especificaba el incremento patrimonial injustificado de los integrantes de esta familia, así como de los antecedentes por tráfico de drogas que disponían algunos de ellos.
Durante la investigación, los agentes comprobaron que este grupo familiar disponía de propiedades inmobiliarias tanto rústicas como urbanas valoradas en más de 1.190.000 euros y que desde 2016 los investigados habían adquirido más propiedades inmobiliarias y vehículos por importe de 1.500.000 euros.
El mecanismo que los detenidos utilizaban para realizar el “blanqueo” se basaba en atribuir los beneficios económicos generados a las explotaciones agrícolas de la aceituna y a las transacciones económicas que se deriva de esta actividad.
Los investigadores solicitaron a la Consejería de Agricultura informes periciales donde se pudo establecer que existía una diferencia de la producción máxima en bruto de las parcelas con los ingresos generados de los detenidos entre 2016 y 2020 de más de 2.000.000 de euros que fueron destinados finalmente a la compra de tierras, viviendas, vehículos y reintegro de efectivo.
La operación ha culminado con la detención de diez personas por un delito de blanqueo de capitales y el registro de seis domicilios, y se ha podido acceder a las edificaciones de 26 fincas rústicas, que cuentan con un total de 600.000 metros cuadrados de olivar, todos ubicados en la localidad de Morón y que son propiedad de los miembros del clan familiar.
En los registros se han intervenido más de 200.000 euros en metálico, tres armas largas, 2.756 cartuchos, 10 terminales móviles, diverso material informático, 322 gramos de sustancias estupefacientes, así como sustancias para realizar el corte de la droga y abundante documentación.
Se han bloqueado preventivamente 93 cuentas corrientes con un saldo total de 670.000 euros, la prohibición de transferir 36 fincas y 27 vehículos.
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