“El equipo de Gobierno del alcalde José Loaiza sigue empeñado en castigar a los jóvenes isleños. Si ya viene demostrando que la Casa de la Juventud es un lastre para el PP desde el momento en el que quiso cerrarla, ahora lejos de esto contempla una propuesta que dificultará el uso de sus instalaciones, lejos de promover que se convierta en un centro vivo y pleno de actividades”.
Así lo ha manifestado la concejala socialista, Araceli Maese, tras la presentación de las Ordenanzas Fiscales para 2015 en las que se pone en vigor una nueva tasa (la número 36, para ser más exactos) que grava la utilización de las instalaciones de la Casa de la Juventud.
La tasa, como se explica en el articulado, será aplicable a cualquier persona física o jurídica, así como a las entidades que soliciten la utilización de las dependencias gestionadas por la Delegación de Juventud, estableciéndose precios que oscilan desde los 37 euros a 20 euros, en función de si se trata del aula, equipamiento con megafonía, proyector, sala polivalente, etc.
Se establecen bonificaciones que beneficiarán a entidades y colectivos sociales y juveniles sin ánimo de lucro “para actividades con claro objetivo social o de interés público”, pero se ofrece las instalaciones para comunidades vecinales, entidades, empresas o particulares, por lo que el equipo de Gobierno “aprovecha unas dependencias dedicadas a la juventud isleña para conseguir réditos económicos a base de una nueva tasa, sin importarle que puedan impedir el normal desarrollo de la actividad que el centro debiera tener”.
Maese afirma que los recaudadores de Loaiza “no tienen necesidad alguna de implantar esta tasa, porque es un edificio público. Lo que tiene que hacer el alcalde es convertirlo en un lugar de activa participación de los jóvenes isleños, no en un sitio recaudador que ofrecer a otros colectivos como usuarios”.
La concejala ve además una “incongruencia” que el PP se empeñara en cerrar la Casa de la Juventud ante las deficientes condiciones que presenta para la actividad asociativa “y ahora resulta que sí está adecuada para recaudar dinero. ¿Cuál es la realidad entonces
La socialista exige al Gobierno local que “no arrincone más a los jóvenes dejándoles sin instalaciones para que las utilicen terceros en lugar de crear un verdadero espacio donde la juventud pueda desarrollar sus iniciativas. Para otros colectivos ya existen otros espacios habilitados con sus tasas correspondientes, como el Centro de Congresos”.
Intervención: una tasa “incongruente y confusa”
Mese asegura que el equipo de Gobierno se encuentra incluso con la negativa del informe de Intervención a la hora de poner en valor esta tasa. Y así, en el punto sexto del citado informe se afirma que “aunque dicha tasa tal vez pudiera encontrar su fundamento jurídico en la interpretación extensiva de la letra O del apartado 4 del artículo 20 del TRLHL, no parece congruente permitir la utilización privativa de las salas y aulas municipales destinadas a la prestación de servicios sociales, culturales o de juventud a entidades que no sean la que colaboran desarrollando la participación ciudadana sin ánimo de lucro, en los ámbitos respectivos de los servicios sociales, culturales o de atención a la juventud”.
Considera la Intervención municipal que el Ayuntamiento “dispone de un equipamiento acondicionado expresamente para su utilización por entidades con fines de lucro y diferentes a las que colaboran desarrollando la participación ciudadana, que es el Centro de Congresos”, cuyas tarifas se establecen en la Ordenanza General de Precios Públicos, y califica de “confusa” la regulación de bonificaciones de la nueva ordenanza fiscal.
Además, ni siquiera el expediente presentado está correcto formalmente, ya que Intervención General afirma que “el expediente de la nueva tasa adolece del defecto de no incluir informe del servicio de Juventud, ni proyección o estudio económico del mismo”.
Por todo ello, y dado que los argumentos expuestos por los técnicos coinciden plenamente con los del PSOE, Araceli Maese exige a Loaiza y a su equipo que retire la tasa de uso de la Casa de la Juventud y “deje de menospreciar a los jóvenes, que tienen pleno derecho a disfrutar de unas instalaciones dignas y no obsoletas y ahora además compartidas como quiere el PP”.
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