La victoria se la llevaron los rondeños a pesar de la pésima primera parte que hicieron y que les pudo costar el partido.
No salieron concentrados los chicos que dirigen el tándem Javier Iglesias y Carlos Mirasol, que en pocos minutos de la primera mitad veían como los malagueños le iban pasando por encima victima de sus propios errores.
Puertosol, un equipo de cantera espectacular, que ha tenido campeones de España en todas las categorías tanto masculinas como femeninas, no cuenta este año con su mejor equipo en sénior.
Con un conjunto joven, que saben hacer bien lo básico y no se complican la vida en exceso fueron aprovechando cada error en ataque de los rondeños para salir al contraataque y llegar a la portería defendida en la primera mitad por Pibe, batiéndolo sin oposición defensiva.
No pasaron buenos momentos los nuestros y cada acción que intentaban en ataque, ya fuera lanzamiento sin elaboración de jugada o intentos insistentes de pases al pivote, eran abortados por la blanda defensa malagueña o atajados por el portero local.
Desolador era el ambiente en vestuarios de los rondeños, noqueados por sus garrafales imprecisiones. Lo mejor de todo es que sabían donde estaba el problema y conocían la solución, y entre tantas cosas lo fundamental era cambiar el chic.
Así lo hicieron y en la segunda mitad todo cambio. De irse al descanso cayendo de 6 goles, al poco de iniciarse el segundo tiempo vieron como se acercaban a su rival y le daban pocas opciones de coger el balón si no era sacando de centro. Los regalitos se habían terminado.
Ahora Miguel Cid era el que fue, Garín dio una exhibición de cómo se lanza de 9 metros, las jugadas eran elaboradas, se buscaban las mejores opciones para lanzar, al pivote se le pasaba cuando era factible y con hacer las cosas bien se llegaba fácilmente ante el portero local.
En defensa se convirtieron en un bloque en 6 metros no dejando lanzar cómodos a sus rivales, rocosos sin forzar exclusiones y acompañados por las buenas intervenciones de Juan A. Rosado en la portería. Esto les propicio hacer algún que otro contraataque.
Al último tercio del choque se llego por delante en el marcador pero sin rematar al rival, podía ganar cualquiera pero la inercia positiva de los rondeños en la segunda mitad les iba a ayudar.
En los últimos cinco minutos y con el equipo rondeño dos arriba en el electrónico los malagueños hicieron presión a todo campo para recortar diferencias, defensa que hizo mucho daño a los de Ronda al no saber atacarla correctamente, perdiendo toda la ventaja y llegando a falta de 30 segundos con posesión de balón y partido igualado a 24. En este caso si se abrió bien el equipo en su ataque y llego el balón al extremo derecho donde Luis Castillo en una buena acción provoco penalti y expulsión del jugador local. Miguel Cid sería el encargado de lanzarlo y poner el definitivo 24-25 en el marcador para alegría de todos.
La mala noticia fué la lesión de Jesús Ballesteros a mediados de la segunda mitad que se perderá varios partidos al dañarse la rodilla derecha.
Victoria apurada ante un rival de nivel parecido al Rugue que se aprovecho de la falta de concentración inicial y las bajas de jugadores como, Fran Duarte, Alejandro, A. Barbero, Ángel o Damián.
Jugaron por el Rugue Balonmano Ronda; Pibe, Rosado, Carlos Gómez, Miguel Cid (4), Oscar León (2), Alberto Síles ( 6), Jesús Ballesteros (2), Candido Ruíz, Luis Castillo (1), Paco Ruíz (3), Pablo Garín(7).
Los parciales fueron; 1-1,5-4,8-6,10-8,14-8.14-12,16-15,17-17,19-21,20-22 y 24-25.
Este domingo a las 12.30 de la mañana en el pabellón San Francisco de nuestra ciudad recibirán al Maristas de Málaga, rival seguro más duro que Puertosol y que pondrá muchas dificultades al Rugue Balonmano Ronda en su presentación ante la afición.
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