Parando letras

Más menos. Menos más

Echar de menos es algo que viene escrito en la naturaleza del ser humano. Echar de más, se vuelve una tarea difícil

Publicidad Ai Publicidad Ai Publicidad Ai

Nos enseñan lo bonito que puede llegar a ser echar de menos, pero ¿quién nos enseña a echar de más? Echar de menos estuvo siempre al alcance de todos porque siempre hay algo que nos falta, alguien a quién necesitamos, que por suerte o por desgracia, ahora no está cerca de nosotros.
Nos toca echar de menos después de haber tenido algo que en su día nos hizo feliz. Y no por ello debemos sentirnos mal, al contrario.
Afortunados de haber experimentado aquello que nos hizo disfrutar de cada paso que dimos. Podemos añorar momentos que sabemos que no volverán a repetirse porque ya perdieron la magia que tiene hacer algo por primera vez. Perderán la emoción, como los árboles pierden sus hojas en cada otoño. Y para volver a ser quiénes eran, necesitan de un tiempo y de unas condiciones específicas.
Podemos también echar de menos a personas que decidieron marcharse por su propia voluntad, dejando su aroma en algún rincón de nosotros mismos. Y al final, convivimos con ello, aceptando que ya no es y que nosotros seguimos siendo. Resulta impensable que después de todo lo que has dado, tomen otro camino que no sea el que marcan tus coordenadas. Y lo inevitable. El curso de la vida. Ese que se va llevando a nuestros seres más queridos y va dejándonos cada vez más solos. Y no tiene vuelta atrás.
Tendremos que aprender a sobrevivir en su ausencia. Siempre te quedas con todo lo bueno, pero a veces los recuerdos asaltan siendo más fuertes que tú. Aunque tú ya sabes, que ahora son ángeles de la guarda que te guían en tu camino. Echar de menos es algo que viene escrito en la naturaleza del ser humano. Echar de más, se vuelve una tarea difícil de realizar. Historias que no desembocan en ningún sitio, personas que abrieron heridas y nosotros fuimos los que nos manchamos las manos de sangre, decisiones equívocas en las que nos dan posteriormente la oportunidad de rectificar.
Somos nosotros los que damos el paso de apartar lo que no nos hace bien. Porque somos seres humanos, en nuestras manos está el error, pero también la solución a éste. Por eso, cuando creas que algo o alguien te aleja de ti mismo, echa de más, que ya echamos lo suficiente de menos.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN