Parando letras

El dinero no lo es todo

No hay una respuesta firme a por qué los amigos son la familia que elegimos, pero lo que sí sabemos es que no los cambiaríamos por nada del mundo

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Las mejores cosas en esta vida no se compran. Qué ilusos aquellos que siguen pensando que el dinero da la felicidad. Se equivocan. Y no es la primera vez que ocurre que niños cuyos padres trabajan muchas horas diarias para traer grandes cantidades de dinero a casa, solicitan comprar horas de atención familiar. No lo es todo. A veces, al todo, lo vamos desgastando poco a poco. Hasta que se termina desvaneciendo. Y en tu cabeza sólo queda más obsesión por aquello que engulle lo único que necesitas: felicidad. No preguntéis cuánto. No hace falta ni una sola moneda para ser feliz. Ni por qué. Ser feliz es algo que debe ser innato. Ni cómo. La felicidad la podemos encontrar en todo lo cotidiano. No hay quien ponga precio a unos buenos días cargados de sonrisas que pinten un nuevo día. Ni a charlas cargadas de consejos sabios, porque quizás, ese consejo te ayude a valerte por ti mismo. No hay una respuesta firme a por qué los amigos son la familia que elegimos, pero lo que sí sabemos es que no los cambiaríamos por nada del mundo. Y desconocemos cuáles son todos nuestros miedos, pero nos ayudan a hacernos fuertes en las adversidades. La forma en la que hacemos feliz a cualquier desconocido varía según cómo nos encontremos. Pero existen tantos pequeños detalles con los que poder cambiar el mundo, que podríamos comenzar con un simple saludo cordial y terminar por ayudar a cualquier anciano a cruzar la calle, a un niño a recuperar su balón que se quedó en la copa del árbol o dar un plato de comida a aquel que lo necesita.  O tan simple como iluminar vidas de forma gratuita: sonriendo. El dinero tan sólo es un juego de cara o cruz. Lanza la moneda del dinero al aire, si sale cara, estás a tiempo de enseñarle todas las armas que guardas bajo la manga. A tiempo de saber que para ser fabricante de sueños, sólo hay que correr tras ellos y no pagar por ellos. Si sale cruz, malgastarás todo siendo un infeliz y cuando quieras darte cuenta, habrás desaprovechado la oportunidad que antes te habían brindado. Así que empieza por hoy, a saber que estas letras sólo tendrán sentido si tú quieres dárselas. Aprovecha. Disfruta de lo que nos regala cada día, sabiendo que lo mejor de todo es aquello que ni el dinero compra.

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