En tiempos de si se puede o no llenar las piscinas públicas y particulares, hay una en la capital malagueña, que tiene un presente más incierto que todo eso. Se trata de la de Puerto de la Torre, de la que este miércoles han vuelto a poner sobre la mesa su realidad los vecinos, y sobre la que han denunciado su situación desde la oposición, tanto desde Con Málaga como desde el PSOE.
Así, la vecina del Puerto de la Torre, Mari Carmen Meneses, en un acto con el grupo municipal de Con Málaga, ha denunciado que “hace dos años pusieron un cartel diciendo que estaría terminada en 2024, pero no lo han hecho, lo único que hacen es meter dinero y más dinero y no sabemos cuándo va a estar abierta otra vez. Queremos respuestas, la piscina es importante para la rehabilitación, vivimos muchas personas mayores en el Puerto de la Torre”.
Otra vecina del distrito, María Sepúlveda, declara que “tenemos un gran problema, llevamos nueve años luchando por tener una piscina. El equipo de gobierno no nos da nada: ni piscina, ni mejora de las calles. Nos tiene olvidados. No nos escuchan, el alcalde tiene que acordarse del Puerto de la Torre un poco, muchas personas mayores y niños necesitamos que la piscina está abierta”.
Para la portavoz del grupo municipal Con Málaga, Toni Morillas, ya van “nueve años con una instalación deportiva tan importante cerrada, sin que los vecinos puedan acceder y, encima, con un nuevo sobrecoste de casi un millón de euros. Esta piscina resume la política de privatizaciones de las instalaciones deportivas del PP, que hace aguas por todas partes. Estamos ante un nuevo ejemplo de negligencia, irregularidades y engaños a los vecinos y a las vecinas”.
Morillas destaca que “no existe ninguna otra piscina en el Puerto de la Torre, se les prometió que la abrirían en 2024, pero lo que nos encontramos es una nueva licitación y un nuevo sobrecoste. Va a cumplir ya una década con las puertas cerradas”.
Mientras tanto, la concejala socialista en el Ayuntamiento de Málaga Mari Carmen Sánchez ha criticado al PP “por dilapidar casi cuatro millones de euros de los malagueños por la mala gestión de las obras de la piscina”.
Para la socialista, “nuevamente son los ciudadanos los que tienen que pagar la factura de un proyecto estrellado del PP”, que, como ha recordado, “arrancó en 2004 con el anuncio de Elías Bendodo, como concejal en el Ayuntamiento de Málaga con un presupuesto estimado de 1,5 millones de euros, pero que en la actualidad alcanza los casi 3,4 millones y que supera los cuatro millones si sumamos a los pufos que dejó la constructora antes de abandonar el proyecto”.
Por su parte, Morillas recordó la historia de la polémica piscina “que abrió sus puertas en 2009, luego hubo una serie de irregularidades en las que se vio implicado el que hoy es gerente de Smassa y que vuelve a estar involucrado en las investigaciones policiales por presuntas irregularidades en la sociedad de aparcamientos. El llamado ‘caso piscinas’ afectaba a irregularidades en la concesión de la piscina. En 2015 la piscina cerró sus puertas rescatándose la concesión ante los graves incumplimientos y obligaciones con la plantilla. En 2017 hubo un incendio y, posteriormente, diversos actos vandálicos que provocaron numerosos desperfectos. En 2021 se hizo una licitación de 800.000 euros para reacondicionar el espacio que tampoco ha surtido efecto y ahora nos encontramos con una nueva licitación, con un nuevo sobrecoste de más de 900.000 euros, y con un plazo de apertura incierta”.
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