La tribuna de Viva Sevilla

Pedir perdón por nuestros pecados

Sin estar declarada Patrimonio de la Humanidad hace más de 25 años, Sevilla ya lo era. Acudan a las imágenes del documental de Orson Welles filmado en la Sevilla de los 60. Hoy no podemos decir lo mismo si paseamos por esas calles del barrio de Santa Cruz que filmó el cineasta.

En la inauguración del “Encuentro internacional sobre arquitectura contemporánea en ciudades históricas” que tiene lugar bajo los auspicios de la UNESCO y subvencionado por La Caixa, el alcalde de Sevilla ha pedido que la Torre del Oro y la Plaza de España, en cuya sede de Capitanía General se celebrará el congreso hasta este jueves, sean declarados Patrimonio de la Humanidad, uniéndose de esta manera al Archivo de Indias, Alcázar y Catedral, ya declarados hace veinticinco años.


Por pedir que no quede. Todo ello olvidando la sanción perdonada a la transgresión de todas las leyes de Patrimonio que permitió la continuación y terminación de las obras de la malhadada torre que deja enana a la Giralda. No importa. Se ha prometido no construir más torres excelsas ni rascacielos que horaden los cielos que perdimos y bajo esta promesa pedimos ser más Patrimonio de la Humanidad aún.


Sin estar declarada Patrimonio de la Humanidad hace más de veinticinco años era ya Sevilla Patrimonio de la Humanidad. Acudan para confirmarlo a las imágenes del documental de Orson Welles filmado en la Sevilla de los años sesenta. Hoy no podemos decir lo mismo si paseamos por  esas calles del barrio de Santa Cruz que filmó antaño el genial cineasta.


No necesitamos más declaraciones sino rigor en el cumplimiento de las leyes. Ahora no se arregla todo con más declaraciones. Ni tampoco encargando al pintor Antonio López un paisaje de Sevilla visto desde la Cartuja. ¿Por qué no se ha encargado un paisaje con una perspectiva inversa, es decir, Sevilla, con la Cartuja al fondo donde veríamos en un segundo plano el flagrante atentado contra el paisaje sevillano? ¿Tardará ese paisaje tanto tiempo en realizarse como el retrato de la familia real? ¿Dónde colgará nuestro Ayuntamiento el ilustre paisaje de la Sevilla ideal que no existe, pues no es cierto que si López es realista debería pintar la perspectiva inversa que hemos indicado?


Sin embargo, para hablar de Patrimonio no hay que irse tan lejos ni llegar hasta la isla de la Cartuja. En la calle de Alemanes, en la propia Catedral y en su Puerta del Perdón junto a esas gradas, “lugar un tiempo de contratación” mencionadas por Cervantes, tenemos que pedir perdón por cierta “restauración” ejecutada por la empresa “J. Pérez Díez S.L. Construcción y Restauración” a la que ahora contribuye también “Artyco. Arte/Conservación y Restauración” y desvelada o destapada hace pocos días. De eso se trata precisamente, de conservación y restauración. Hace una década el “Deus ex machina” de tamaña restauración titulaba curiosamente con donosura italiana “Manca finezza nel restauro” un artículo de su contribución al catálogo Un siglo de Arquitectura a través del Archivo de FIDAS/COAS. Y ciertamente, de finura y de sensibilidad es de lo que estamos escasos en la restauración.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN