El PNV ha advertido de que "quien quiera gobernar o pactar" con él para la gobernabilidad de Euskadi, deberá asumir que el nuevo estatus político es "una prioridad" para la formación jeltzale. Por su parte, el PSE ha afirmado que existen "mimbres para el acuerdo" con el partido que lidera Andoni Ortuzar pero "queda mucha tela que cortar en las conversaciones". Mientras, EH Bildu ha indicado de que un acuerdo con la coalición soberanista "ofrece más garantías" y "da más solidez" a un pacto.
En declaraciones a Radio Euskadi, el parlamentario del PNV Luis Javier Telleria se ha referido a las conversaciones iniciadas por su partido con el PSE-EE para conformar un próximo ejecutivo y que proseguirán la próxima semana con EH Bildu.
Ha recordado que, en los últimos cuatro años, el PNV gobernó en solitario con 27 parlamentarios, "pactando leyes con unos grupos y otros" y es "un juego que también se puede hacer en la próxima legislatura". "Esto no obliga a que tengamos que estar con uno o con otro. El PNV no está ya predispuesto porque ayer se cruzaron unos votos en PSE con el PNV. Todavía está el panorama enormemente abierto. Hay que hablar mucho, hay que hablar discretamente", ha indicado.
Además, ha advertido de que el nuevos estatus político "es una prioridad" para su partido, y así lo ha reivindicado "durante toda la campaña electoral". "Sería un fracaso por nuestra parte no insistir en que eso forma parte de una de las prioridades en el próximo Gobierno", ha manifestado.
Por ello, ha dicho que "si somos honestos y honrados", los jeltzales deben "insistir y trabajar en ello", por lo que es preciso que "los grupos que quieran gobernar o pactar con el PNV asuman esa parte del programa electoral del PNV".
PSE
El parlamentario del PSE Eneko Andueza ha afirmado, desde la "prudencia", tras el primer contacto con el PNV, que "se pueden vislumbrar mimbres para llegar acuerdos". Sin embargo, ha añadido que "queda mucho que hablar, que tratar, y debemos ser prudentes".
Según ha indicado, "tanto desde la oposición como desde el Gobierno", los socialistas trabajarán para "priorizar y anteponer la agenda social" a otras cuestiones. Andueza ha admitido que el PSE no descarta un acuerdo de coalición con los jeltzales porque "no nos importa tanto ni el con quién o el cómo, sino el para qué". "Es muy temprano para poder avanzar en este sentido, primero hay que abordar las políticas y luego las fórmulas de acuerdo", ha señalado.
No obstante, ha advertido de que "queda mucha tela por cortar, muchísimo por avanzar y muchísimo por negociar". "Dentro de un proceso de negociación pueden llegar momentos en los que se pueden dar cuenta de que no existe sintonía y se rompan las negociaciones", ha dicho.
Por otra parte, ha censurado a EH Bildu que niegue a PSE la autoría de iniciativas "muy importantes" como las alcanzadas, con el apoyo de la coalición soberanista, en la pasada legislatura, entre ellas la Ley de Vivienda o la relativa a la pobreza energética, y ha puesto en duda que un Gobierno PNV-PSE pueda ser "débil".
EH BILDU
Por su parte, el representante de EH Bildu en la Cámara autonómica Iker Casanova, quien cree que "el PNV ha dado prioridad a las conversaciones con el PSE", ha asegurado que, en caso de que las conversaciones con los jeltzales "no fructifiquen", la coalición presentará una candidata a lehendakari.
Sin embargo, ha afirmado que su "primera opción" es "seguir explorando acuerdos" para un Gobierno que lleve a Euskadi "a un nuevo estatus político y blinde los derechos de la ciudadanía". "Ésa sigue siendo nuestra primera opción y eso pasa por un acuerdo con el PNV y con Podemos", ha insistido.
Además, Casanova ha censurado que se intente planteas dos opciones, "o un giro hacia políticas más sociales con el PSE, o una apuesta hacia un nuevo estatus con EH Bildu".
En su opinión, un pacto con EH Bildu ofrece "más garantías de avanzar en ambos terrenos, y da más solidez que un acuerdo sustentado en el PSE", entre otras razones, "porque no da mayoría, necesitaría estar recurriendo continuamente a nuevos apoyos".
A su juicio, resulta "incompatible" un gobierno con el PSE el "avance hacia un nuevo estatus", porque este último objetivo "haría saltar por los aires" el Ejecutivo, ya que los socialistas se han pronunciado "claramente en contra" del derecho a decidir "y cualquier avance en esa cuestión".
También ha advertido de que, en el plano social, "no va a haber un giro a la izquierda" porque el PSE y el PNV ya han aplicado políticas conjuntas en esa materia en la pasada legislatura. "Seguimos reivindicando la posibilidad de ese Gobierno sólido para avanzar hacia el autogobierno y el nuevo estatus, pero también para dar un giro a las políticas sociales", ha dicho.
En caso contrario, y "consciente" de que el pacto con el PSE "cobra más posibilidades", ha asegurado que la formación a la que pertenece actuará "con responsabilidad" en la oposición y no negarán "el pan y la sal".
Ha insistido, no obstante, en que su propuesta de sumar junto a PNV y Elkarrekin Podemos en un Ejecutivo vasco "no es ningún adorno o bandera para conseguir votos", sino "un objetivo político a materializar". "Ni vamos a ser muletas ni somos muletas de nadie", ha puntualizado.
ACERCAMIENTO AVANZADO
El portavoz parlamentario de Elkarrekin Podemos, Lander Martínez, cree que el PNV y el PSE "ya empiezan a tener un acercamiento bastante avanzado" para la configuración de un acuerdo de Gobierno, pese a que EH Bildu pretenda un Ejecutivo "con dos patas difícilmente conjugables".
Todos sabemos cuál es el aliado natural del PNV y ése va a a ser finalmente el acuerdo de Gobierno, son dos patas del Parlamento que se necesitan mutuamente", ha afirmado.
Por otra parte, se ha mostrado "preocupado" por que dos fuerzas "con las que se podría conformar un bloque progresista para avanzar en políticas sociales", estén "compitiendo para ver quién es la muleta más progresista del PNV". "Quién cree que es capaz de llevar hacia la izquierda, más hacia el blindaje de los derechos sociales al PNV, cuando nadie les va a mover de sus posiciones", ha indicado.
A su juicio, la votación en la Mesa del Parlamento dejó claro ayer que el PSE "se desentendía de ese bloque progresista y optaba por ser muleta del PNV". "Me preocupa que EH Bildu esté en competición con el PSE para ocupar la posición de comparsa del PNV", ha dicho.
OPOSICIÓN CLARA
La parlamentaria popular Laura Garrido ha asegurado que su formación se reivindica "como oposición clara" tras el "abandono" del PSE de "esa posición", al convertirse "en muleta y sostén del PNV". En este sentido, ha censurado el "acuerdo excluyente" que ha dejado fuera de la Mesa del parlamento al PP, "un preámbulo de los pactos que quiere el PNV".
Sin embargo, ha advertido a los jeltzales de que "con los resultados sobre la mesa, no suma con el PSE", por lo que precisará del apoyo de "un tercero", que será "claramente" EH Bildu, una "fórmula" que "ya está siendo utilizada" en el Ayuntamiento de Vitoria y Álava, que considera "un banco de pruebas" para el próximo Ejecutivo autónomo. "La futura gobernabilidad en Euskadi va a estar condicionada por un partido radical", ha insistido.
Garrido ha dicho desconocer "cuáles van a ser las prioridades del PNV" y se ha preguntado "hasta qué punto" la formación jeltzale y el PSE "van a tener sintonía", a no ser que los socialistas "claudiquen de sus posiciones".
"Porque una de las prioridades del PNV es el nuevo Estatus", ha advertido la parlamentaria, para quien el PSE "es un partido bastante barato" que "enseguida claudica de sus posiciones". Además, se ha preguntado si llegará a "abandonar sus posiciones de defensa del Estatuto y la Constitución".
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