El Puerto

Concentración de la Plataforma de Hombres y Mujeres contra la Violencia de Género

En la misma se ha leído un manifiesto redactado por JSA El Puerto y que ha sido leído por la compañera Gloria Bocanegra.

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  • CONCENTRACIÓN VIOLENCIA GÉNERO

En la concentración de la Plataforma de Hombres y Mujeres contra la Violencia de Género se ha leído un manifiesto redactado por JSA El Puerto y que ha sido leído por la compañera Gloria Bocanegra.

“La violencia de género es una escandalosa realidad que cada día se extiende más y afecta ya a toda la sociedad. Es el claro síntoma de que algo no está bien, de que algo no marcha. Es la evidencia diaria de nuestras contradicciones y una exigencia inmediata para acometer los problemas que están en su origen. 

Sus consecuencias son terribles; miles, cientos de miles de mujeres viven atemorizadas ante una continua situación de terror físico y/o psicológico en sus hogares y entorno más inmediato.

Decenas de mujeres mueren cada año, en nuestro país, a causa del sexismo, el miedo y el odio de los hombres. Al tradicional desprecio desde la supuesta superioridad masculina y al miedo a la libertad de las mujeres, ahora se une un nuevo odio, que brota de la envidia por su capacidad de mejorar y superarse a sí mismas.

De esta combinación del horror, surge una situación en la que cientos de miles de mujeres viven bajo la agresión continua, física o psicológica, de sus parejas o ex parejas. Sin duda alguna, es la situación más grave, por injusta y por extendida, que vive nuestra sociedad.

Sorprendentemente, los causantes de este mal, no son personas ajenas, extrañas a las víctimas. Todo al contrario, el problema tiene su origen, incomprensiblemente, en el entorno más cercano de estas mujeres y por quienes dicen amarlas; son sus maridos, novios o parejas los que maltratan a las mujeres que, supuestamente, más quieren. Son los hombres de la propia casa, los que provocan tanto dolor.

Los agresores, en su gran mayoría, no son hombres diferentes, especiales o enfermos. Son hombres comunes, ciudadanos típicos, en muchos casos modélicos, amables y reconocidos en el vecindario y, a menudo, respetuosos y cordiales en su trabajo. Son hombres que basan su seguridad personal en valores que representan el estereotipo tradicional masculino; el poder a través de la fortaleza física, la competitividad, la agresividad y un estatus de superioridad y privilegio con respecto a la mujer. Son hombres que no están siendo capaces de reconvertirse hacia un tipo de relaciones igualitarias, basadas en el respeto mutuo.

Los agresores, aunque muy numerosos, es verdad que no son, ni mucho menos, la mayoría. No dejan de ser los casos extremos, pero... ¿y el resto? ¿Dónde estamos y qué hacemos el resto de personas?

Así llegamos a la cuestión clave: ¿Te has parado a pensar si puedes hacer algo más, de lo que haces, para luchar contra la violencia de género? Esta es la pregunta que lanzamos.

La mayoría, hasta ahora, nos hemos limitado a contemplar desde la distancia este gravísimo problema, sintiéndonos libres de culpa y pensando que bastaba con no ser nosotros los maltratadores. Pero eso no es suficiente, pues EL SILENCIO NOS HACE CÓMPLICES.
¿Qué hacemos cada uno de nosotros para acabar con la violencia de género? ¿Es moralmente asumible que la inmensa mayoría de los hombres y mujeres no nos movilicemos para acabar con esta plaga que nos invade?

Hay unos valores como la igualdad, el respeto, la generosidad y la libertad, que son los que tenemos que promover, no podemos permitir que el machismo nos siga comiendo terreno, sobre todo en personas cada más jóvenes.

Según estos últimos estudios el 61% de las jóvenes han sido víctimas de la violencia machista, a través del móvil. Reflejando un aumento de los porcentajes en que han reconocido haber sufrido alguna situación de maltrato.

Por eso ha llegado el momento de dejar atrás todas las excusas, los inconvenientes, los
miedos, las comodidades. Es la hora de actuar. No podemos seguir permaneciendo ocultos, pretendiendo no tener responsabilidad moral ante las víctimas.
Debemos alzar nuestra voz y hacer llegar a la sociedad un claro mensaje de rechazo absoluto de las raíces de la violencia, negando cualquier razón que la justifique. No hay excusa posible.

Los hombres violentos han de saber que sus actuaciones son inaceptables y que nos estamos movilizando contra ellos.

Por eso Juventudes Socialistas de El Puerto lanzamos desde aquí una petición a todos los hombres: os pedimos que no miréis a otro lado, que no sigáis tolerando en vuestro entorno ninguna situación de violencia, sexismo o discriminación hacia las mujeres. Es vuestra responsabilidad actuar allí dónde se dé o se prepare el horror. Denunciad aquellos casos que conozcáis y apoyad, sin ninguna duda, a las víctimas pues necesitarán de toda vuestra ayuda.

Recordar que... desde Septiembre de 2007 las mujeres víctimas de la violencia de género cuentan con otro servicio: la llamada al teléfono 016, un servicio telefónico de información y asesoramiento jurídico en materia de violencia de género. Puedes llamar desde cualquier sitio porque las llamadas que hagas a este número no dejarán ningún rastro en la factura del teléfono.”

 

Juventudes Socialistas de El Puerto de Santa María
¡Hacedlo por ellas y por vosotros! ¡Tolerancia Cero!

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