Todo sigue igual

¿Qué va a pasar con el referéndum catalán? Hay gente que espera una respuesta contundente por parte del Gobierno. Que Don Tancredo diga algo

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai

Era la comidilla en nuestra taberna preferida. La moción de censura ha dado paso por un par de días a la proeza de Nadal, que se empeñó en ganar una y otra vez el Roland-Garros y lo ha conseguido diez veces, y a la convocatoria del empecinado Puigdemont y sus acólitos, que se han empeñado en saltarse la ley constitucional y hacer su referéndum a toda costa. 

Me decía Lucio que se ha tragado todo el debate de la moción de censura interpuesta por Podemos contra Mariano Rajoy, y me decía también que le han gustado las formas y el tono por los que ha discurrido. Lástima de que la moción estuviese fracasada antes de nacer. Ni ha servido para nada, ni nadie ha sacado nada en claro. Una moción que sólo va dirigida a poner de manifiesto lo que todos los días ya nos lo pone la prensa, o sea la corrupción, no tiene sentido. Una moción en la que no se le reprocha al Gobierno su política ni se ponen de manifiesto propuestas de políticas alternativas no parece tener sentido salvo que el objetivo sea otro y se quiera conseguir de rebote. En política, las carambolas son muy difíciles. Los objetivos han de ser claros y estar fundamentados. En eso, Pablo Iglesias se ha equivocado. Poner la moción para conseguir objetivos distintos al cambio del equipo gobernante es sencillamente absurdo.

Claro que cada uno ve el vaso medio lleno o medio vacío según sus intereses. Pablo Iglesias se muestra contento porque, según él, la moción de censura ha puesto de manifiesto que una mayoría de la cámara no ha votado a favor de Rajoy, por lo tanto, concluye, la mayoría quiere quitar a Rajoy del Gobierno. Rajoy se siente muy satisfecho porque el resultado de la votación la ha ganado, ya que han votado en contra más del doble de los que han votado a favor, aunque no tengan la mayoría absoluta. Rajoy juega con que los nacionalistas independentistas no pueden sumar votos con otras fuerzas como el PSOE, por tanto, la suma de votos de la izquierda sin los independentistas, no es mayor que los votos del PP más Ciudadanos. Total que todo sigue igual y se ha perdido el tiempo. Claro que tampoco nos resuelve mucho a los españoles el tiempo empleado por los señores diputados.

¿Qué va a pasar con el referéndum catalán? Hay gente que espera una respuesta contundente por parte del Gobierno. Que Don Tancredo diga algo. Pero, según Lucio, con estos calores es mejor seguir callado y pasar el mayor tiempo posible a la sombra, lo que, por otra parte, es lo que terminarán haciendo (lo de pasar tiempo a la sombra) los inductores del referéndum ilegal. Con lo fácil que sería cambiar la Constitución, reconocer el derecho de las autonomías a votar por su independencia y, después, que voten todas. Seguramente llegaremos a tener de nuevo independiente al Cantón de Cartagena.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN