El alcalde de Barbate, Miguel Molina, presidió ayer viernes, 26 de mayo, la Asamblea para debatir sobre el estado actual del puerto de Barbate. Un encuentro al que acudieron un buen número de usuarios y representantes de asociaciones ubicadas en las instalaciones portuarias. Tras la exposición de opiniones de los presentes, quedó patente el acuerdo sobre el abandono al que la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA) somete al puerto barbateño.
Por tanto, ante el hartazgo por esta situación y con el fin de denunciar la dejadez de la administración autonómica, la Asamblea acordó por unanimidad movilizar al pueblo de Barbate y realizar una convocatoria de manifestación para el próximo sábado, 17 de junio, a partir de las 11.00. La marcha comenzaría en la Casa del Mar y se dirigiría al puerto pesquero de la localidad, donde los manifestantes expondrían las deficiencias de las instalaciones portuarias, exigiendo soluciones por parte de la APPA.
Además de la manifestación convocada por la Administración local, el equipo de Gobierno llevará al próximo Pleno Ordinario del 7 de junio una moción de urgencia para que la Corporación al completo exprese su apoyo al sector pesquero de la localidad y sus reivindicaciones con respecto a las instalaciones portuarias. También se redactará un escrito de protesta para poner en conocimiento de los medios de comunicación todas las deficiencias del puerto de Barbate.
Falta de seguridad y limpieza, altos precios en los atraques, servicios inexistentes… la lista de deficiencias en la zona portuaria es extensa en lo que el alcalde de Barbate, Miguel Molina, ha definido como “un uso incompetente por parte de una gestión pública”.
Para el alcalde, “el puerto no puede darle más la espalda al pueblo”, y denuncia que la APPA tampoco cuenta con el Ayuntamiento, ya que “ni consultan ni traen proyectos de desarrollo a la Administración local, se limitan a hacer lo que les da la gana en el puerto”. De igual forma “tampoco informan acerca de los proyectos y propuestas que se les hace llegar”. Para el alcalde, los culpables de la situación tienen nombres y apellidos: el gerente de la APPA y el director de Puertos, Alfonso Gómez de Celis y Diego Anguís, respectivamente, a los que “habría que pedir explicaciones por lo que está sucediendo”. El alcalde finalizó dejando claro que “vamos a empezar a denunciar las irregularidades y nos comprometemos a movilizar a la ciudadanía con todos los medios a nuestro alcance”.
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