La nueva N-232 ya es una realidad. El recién estrenado tramo que une Castellón con Aragón ha sido inaugurado este miércoles en presencia del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien ha aprovechado la ocasión para recordar que hay vida más allá de Madrid.
Sánchez ha reconocido que escucha mucho al ‘president’ Puig hablar de «una política de infraestructuras distintas donde Madrid no es el centro, sino una parte más de una malla más rica y diversa».
La inauguración ha llegado después de cinco años de obras y múltiples retrasos. El presidente del Partido Popular en la Comunidad Valenciana (PPCV), Carlos Mazón, se adelantaba a la cita y visitaba el pasado jueves Morella para aguar lo que él mismo califica como «una fiesta» de Sánchez y Puig. «Esta es la fiesta del retraso y de las cosas por acabar», reprochaba el presidente del PPCV.
Pese a los retrasos, la N-232 ya está en marcha y desde hoy mejora la comunicación entre Vinaròs y Morella. Más de tres mil vehículos se beneficiarán a diario del nuevo trazado, que reduce sustancialmente los tiempos de conducción entre la costa y la capital de Els Ports. Así lo ha anunciado Puig, asegurando que «hoy es un gran día».
Con un presupuesto de 42 millones de euros, las obras han eliminado 68 curvas y han acondicionado casi 8 kilómetros. El próximo proyecto se ejecutará entre La Torreta y Morella Sur, y completará el último tramo de la N-232 en Castellón.
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