El liderazgo de Juan Espadas del PSOE en Andalucía está en entredicho. Es un secreto a voces. Las dudas que despierta el que fuera alcalde de Sevilla son tales que su designación como senador por el Parlamento ha sido interpretado como la forma más digna de invitarle a que abandone la secretaría general del partido en la comunidad autónoma.
Uno de los candidatos que se la disputó en las primarias, el catedrático de la Universidad de Sevilla Luis Ángel Hierro, aporta ahora las cifras de la formación en el ciclo electoral que comprende las elecciones autonómicas, el 19J de 2022, las municipales del pasado 28M y, finalmente, las generales del 23J. Los resultados del estudio llevado a cabo son demoledores. Entre otras, cabe destacar que la debacle del PSOE es especialmente preocupante en las provincias de Córdoba y Jaén, pese a que en esta última se retiene el Gobierno de la Diputación.
En cuanto a Málaga y Almería, Hierro advierte de que los socialistas se han quedado “al borde de la irrelevancia en términos de poder local, dado que los habitantes gobernados por alcaldes y alcaldesas socialistas son el 6,6% y el 11,5%, respectivamente, lo que denota el nivel de deterioro acumulado por el partido desde hace muchos años” en estos territorios.
En Sevilla y Huelva, el análisis advierte de la incapacidad del PSOE “de recuperar el voto perdido por los partidos a su izquierda en las generales, así como las grandes pérdidas de poder local”. Capítulo aparte merece Cádiz. Hierro remarca que, pese a que hay un saldo de solo diez concejales perdidos, cuenta con seis ayuntamientos menos y, nada más y nada menos, que la Diputación.
En resumen, el catedrático de la Universidad de Sevilla apunta dos cuestiones de suma importancia para los intereses del PSOE en Andalucía. Por un lado, lamenta que no hay alcalde socialista en cuatro capitales, Granada, Huelva, Jaén y Sevilla, con respecto al mandato anterior, y tampoco en Jerez, uno de los municipios con mayor peso específico en el conjunto de la región.
Por otro, señala que el PSOE “tiene como tarea recuperar más de 443.000 votos para tener la oportunidad de gobernar Andalucía, una distancia en estos momentos casi insalvable”, teniendo en cuenta de que incluso cuando las siglas mostraron mayor resistencia, el 23J, esto “no se tradujo en el mantenimiento del número de diputados y senadores”, por lo que Pedro Sánchez se ha visto necesitado de los apoyos de Junts y el PP goza de mayoría absoluta en la Cámara Alta.
El informe coordinado por Hierro no aporta más valoraciones (aunque hay números para entretenerse un buen rato), pero deja entrever la falta de respuesta por parte de Espadas. El motor del PSOE se gripó, no cabe duda, a raíz de los escándalos de corrupción en la Junta de Andalucía y la llegada al poder de Juanma Moreno. A partir de ahí, a los socialistas no se les reconoce.
Ni han sido capaces de armar una oposición seria en el Parlamento ni han conservado su poder municipal. El debate nacional es un lastre. ¿Cómo se explica desde Cádiz las cesiones vergonzantes al independentismo? Se avecina lío grande en las casas del pueblo.