Crece el número de restaurantes que entre su oferta se encuentra la posibilidad de llevar sus platos hasta las viviendas de sus clientes. Por otra parte, los establecimientos take away ofrecen una estupenda fórmula para comer de forma rápida con una gran variedad de menús. La oferta es amplia y variada, pero todos ellos necesitan de envases apropiados para ser transportados con la seguridad suficiente y manteniendo la calidad del producto
Toda una nueva industria se abre como complemento o alternativa a la restauración, el de la comida para llevar. Una nueva manera de entender la forma de la que se disfruta de cocinas profesionales que requiere de una demanda, cada vez más exigente, de fabricación de envases y productos de un solo uso. El packaging comida para llevar se ofrece como la ciencia que abre posibilidades en este mercado. En este sentido, merece la pena destacar la tienda online monouso.es, líder en el servicio digital de este tipo de productos de usar y tirar y al que se accede a través del enlace sugerido.
La variedad de recipientes, formatos y materiales para ser utilizados como soporte para productos alimenticios directos al consumidor es enorme. La demanda crece y el packaging trata de dar cobertura de forma original y segura a los muchos restaurantes y productores de comida para llevar que captan la atención del usuario. El packaging es la forma en que se presenta al consumidor un producto listo para su consumo. Este requiere un diseño atractivo, original, impactante… Pero también, que sea útil para su almacenaje y posterior distribución.
Tipos de envases más comunes para comida para llevar
Llegado el momento de tener que elegir un recipiente adecuado para la comida que hay que transportar se deberán tener en cuenta las características que tendrá el recipiente según las propiedades del producto que lleva en su interior. Según este factor, los materiales que generalmente se utilizan son el papel, el cartón, la caña de azúcar, el vidrio, el foam, el aluminio, plástico (PET, PP o PS).
Envases de cartón y papel
La ventaja que poseen estos dos primeros envases son su facilidad para el almacenamiento, ya que pueden diseñarse fácilmente para su apilamiento o para encajar exactamente en los espacios de almacenamiento, así como su ligereza y facilidad para imprimirlos. Por otra parte, están considerados envases ecofriendly, ya que al provenir de la celulosa pueden ser biodegradados con facilidad y servir para el compostaje. Además, es de los tipos más económicos del mercado.
Envases de caña de azúcar
Pero si de embalaje ecológico se trata, los mejores son, sin lugar a dudas, los que utilizan la planta Saccharum Officinarum, es decir, los provenientes de la caña de azúcar. Cada vez más utilizados en ecommerces especializados en menaje hosteleria online por su calidad, resistencia y maleabilidad, estos son completamente biodegradables y también muy ligeros. Pueden ser usados en los microondas, pues aguantan temperaturas entre los intervalos que van desde los 120ºC hasta los -10ºC.
Envases de vidrio
Posiblemente sean los envases más asépticos, más saludables. Considerados uno de los envases para líquidos más tradicionales y populares, que ofrecen mucha confianza al consumidor, pues puede ver claramente el estado o aspecto del producto. Es capaz de conservar en todo su esplendor el sabor de los alimentos que porta, y también es ecológico, ya que en la actualidad el reciclado de vidrio está ampliamente extendido. La dificultad de este objeto de envasado se encuentra en el elevado coste, su excesivo peso y dificultad para almacenar y transportar debido a que es un material muy delicado.
Envases foam
Estos envases están hechos de EPS (Poliestireno Expandido) y su principal ventaja es su alta capacidad como aislante térmico. Estos objetos son desechables, poseen diseños especializados para contener, preservar, proteger y transportar los alimentos cuando estos necesitan de unas condiciones térmicas particulares. Gracias a su composición, no aparecerán microorganismos que puedan perjudicar la calidad del producto. Por otro lado, son muy resistentes tanto a la humedad como a los impactos, por lo que se considera un envase ideal para un buen número de comestibles.
Envases de aluminio
Por su parte, este otro tipo de envase posee ventajas claras, como son los largos periodos de tiempo con los que consigue mantener el producto protegido, impidiendo la entrada de luz y oxígeno. Pero, eso no es todo, también es muy ligero, resistente a la grasa, al agua y al fuego, además de ser un material difícil de romper. Está considerado como un material barrera contra los organismos. Completamente neutro, por lo que los alimentos mantienen absolutamente todas sus características y propiedades organolépticas.
Envases de plástico
Existe una amplia variedad de tipos de plástico utilizados para el embalaje y el envasado de productos (PET, PP o Polipropileno y HDP o Polietileno de alta densidad). Al igual que ocurre con los de caña de azúcar son aptos para el microondas. Serán válido para este electrodoméstico si en su base se encuentra un código (triángulo con tres flechas con una enumeración del 1 al 7) con un número del 3 al 5. Este tipo de envases tienen un muy bajo coste de producción, baja densidad, y son impermeables.
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