Cada vez son más las personas que acaban realizando su trabajo desde el hogar, la práctica conocida popularmente como
“teletrabajo”. Los motivos son muy diversos, desde una reforma en las oficinas, una política de conciliación familiar hasta una solución ante una pandemia.
Lo cierto es que realizar el cambio hacia el teletrabajo puede ser una situación algo compleja, pues no todas las personas disponen de una habitación extra en sus hogares para acomodarla como una oficina, teniendo que recurrir a usar rincones de habitaciones ya existentes. En cualquier caso, es
importante seguir una serie de pasos a la hora de reconvertir una habitación en un espacio que sirva de oficina, como bien indican en la página especializada análisis de productos para el hogar
SocialWin.es. A continuación se mencionan los tips más básicos que se deben tener presentes a la hora de la remodelación de la habitación.
Iluminación
La iluminación es uno de los factores clave que ayudarán a mejorar el rendimiento laboral, este punto tan esencial en muchas oficinas y lugares de trabajo no lo tienen en cuenta, acabando con ambientes asfixiantes que dificultan la concentración de los trabajadores.
Para evitar este problema, hay que elegir correctamente la iluminación,
optando siempre por una luz natural en el caso de que sea posible, localizando el escritorio o zona de trabajo cerca de una ventana, pues se ha demostrado que la luz natural ayuda a mejorar la concentración y el rendimiento durante la jornada.
En el caso de no disponer de luz natural o bien se necesita trabajar cuando no hay luz solar, es necesario adecuar el espacio con lámparas, para ello se debe apostar siempre por
lámparas que den una luz potente pero cálida, evitando a toda costa las luces con tonos azulados, como bien indican en el portal especializado en decoración del hogar
Planet51.es, pues son muy invasivas y al cabo de varias horas de exposición, pueden ser realmente dañinas para los ojos.
Decoración
La decoración es otro de los factores que influyen positiva o negativamente en el rendimiento, jugando un
papel fundamental los colores tanto de la pared como de los muebles, el tipo de muebles elegidos para la oficina así como los detalles que coloquemos en la misma, como suelen ser las plantas entre otros.
Para conseguir una oficina agradable que nos invite a trabajar, hay que elegir siempre un
color para las paredes que sea suave, da igual que prefieras un tono naranja o uno azul, lo realmente importante es que el tono final no sea muy brillante y llamativo, más bien debe ser un color pastel muy suave. Si quieres saber más acerca del tema puedes consultar el siguiente
blog especializado en decoración e iluminación de este tipo de espacios.
Con las paredes ya pintadas, es momento de elegir color para los muebles y demás decoración, para ello hay que seguir una sencilla regla, la cual tiene como base
centrarse en 2 o 3 colores para decorar, de esta forma sólo faltaría elegir dos colores más que combinen con las paredes para que el ambiente final sea agradable e invite a pasar horas ahí dentro.
Respecto a los
muebles, es importante fijarse más en la ergonomía de los mismos que en su diseño, pues el propósito de los mismos no es decorar si no conseguir que durante la jornada laboral estemos cómodos y no suframos dolores en la espalda o cuello, a causa de haber elegido la silla más bonita de la tienda pero la menos ergonómica.
Distribución y orden
Cuando se vaya a transformar una habitación en una oficina, es importante
hacer una lista de todo el material que se suele utilizar a lo largo de la jornada laboral como bien aconsejan en el siguiente
portal de decoración, ya sean documentos, libros, diccionarios o agendas entre otros, además será imprescindible indicar la frecuencia con la que se suelen usar, de esta forma se estará indicando de forma implícita la importancia o prioridad que tienen cada uno.
Con la lista hecha, es el turno de distribuir todos estos artículos anotados cerca del escritorio o zona de trabajo, de tal forma que se tengan a mano, siendo los más consultados o recurridos los que estén más cerca. Algo muy
importante es que están todos localizados de forma estratégica para evitar tener que levantarse cada cinco minutos para cogerlos o consultarlos, de esta forma se habrá optimizado el lugar de trabajo.
Finalmente, sólo queda mencionar que estas oficinas improvisadas deben ser un espacio el cual visitamos única y exclusivamente durante nuestra jornada laboral, hay que evitar pasar los momentos de tiempo libre en las mismas, pues acabaríamos por mezclar el ocio con el trabajo, teniendo la sensación de no desconectar nunca del trabajo.