Los problemas del euro se intensifican a medida que la inflación aumenta, mientras que el dólar se beneficia de su consolidación como valor refugio
La inflación no da tregua. La escalada se acentúa en los últimos meses, superando el 10%, al mismo tiempo que el suministro de gas se pone en duda y el crecimiento se ralentiza. El conflicto armado entre Ucrania y Rusia está dejando un reguero de problemas de toda índole. Al coste humano se está sumando una crisis económica que está golpeando una buena cantidad de países.
Monedas como el yen japonés o la libra esterlina han perdido un 20% de su valor, mientras que el euro ha caído, en lo que va de año, hasta un 15%, mientras ve cómo la inflación golpea sus fronteras. Los países que disponen de una moneda más débil pueden ver en el dólar, un refugio potente, ya que consigue abaratar los bienes y servicios vendidos a Estados Unidos, lo que ofrece un impulso a las exportaciones.
Por otro lado, los inversores suelen preferir apostar por el dólar cuando la economía mundial se resiente, debido a que el tamaño del país americano convierte en un “refugio seguro” su moneda, con lo que su precio sube. Invertir en el mercado de divisas implica ciertos riesgos. Sin embargo, son muchas las plataformas que ofrecen información precisa acerca del estado actual de la economía. Entre en Internet y negocie varias divisas en línea con todas las garantías, apostando por aquellas que considere que van a dar mejores resultados dada la deriva actual del mercado.
El dólar, en su nivel más alto
La moneda americana ha alcanzado su mayor altura en los últimos 20 años frente a algunas de las monedas más potentes del mundo. Esto se traduce en que resulta más caro comprar dólares en los países que utilizan cualquier otra divisa diferente al dólar, como el euro o el peso.
El índice DXY, encargado de medir el valor del dólar frente a otras seis fuertes monedas -incluidos el euro, el yen y la libra esterlina- indica que la moneda americana ha crecido un 15% en 2022, lo que significa que el dólar se encuentra en su punto más alto en 20 años.
El aumento de la apreciación del billete verde desde un punto de vista global se produce en mitad de un veloz crecimiento de las tasas de interés. En otras palabras, los bancos centrales han tomado la medida de subir el costo del crédito con el fin de intentar mantener a raya la inflación; sin embargo, esta misma política trae consigo una cortapisa para el crecimiento económico.
El motivo principal para que el dólar haya escalado tanto se encuentra, entre otros motivos, en las decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos, algo así como el banco central americano. El Fed ha aumentado las tasas de interés en diversas ocasiones a lo largo de este año con el fin de controlar el imparable aumento del costo de la vida.
La adopción de esta medida se ha traducido en un crecimiento de los rendimientos relacionados con los productos financieros que emplean dólares, instrumentos mediante los cuales pueden financiarse, como los bonos del gobierno estadounidense.
El conflicto entre Rusia y Ucrania, otro de los motivos principales del crecimiento del dólar, ha generado un importante seísmo mundial. Ante la inestabilidad y la inflación, los inversores se han volcado en la compra de miles de millones de dólares en bonos del Tesoro estadounidense a modo de valor refugio. Estos bonos se pagan en dólares, lo que produce que los los inversores abandonen otras divisas en favor del dólar. A mayor demanda, mayor aumento del valor de la moneda americana.
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