Sevilla y Cádiz fueron ayer protagonistas absolutas de la histórica huelga general convocada esta mañana en el sector aeroespacial en toda España. El objetivo era protestar por la oleada de despidos planteada por empresas de la envergadura de Airbus o Alestis por el dramático descenso de pedidos por la pandemia.
Los sindicatos mayoritarios cifraron el apoyo a la huelga en cerca de un cien por cien tanto en Sevilla como en Cádiz. En ambas provincias, los trabajadores salieron a la calle de forma masiva a protestar por lo que consideran una medida desproporcionada por una situación coyuntural.
Además, reclamaron más ayudas públicas tanto al Gobierno central como a la Junta en estos momentos para no perder las capacidades tecnológicas y el talento humano alcanzado durante décadas.
“Hay un interés de desmantelar el sector en Sevilla y Cádiz y, en general, en toda Andalucía”, avisó Manuel Jiménez, secretario general de Industria de UGT-A. Jiménez lideró la protesta junto a la secretaria general de CCOO-A, Nuria López, ante la delegación del Gobierno central situada en la Plaza de España de Sevilla.
“La solución pasa porque aportemos circulante a las empresas, incluso la participación en Airbus y otras grandes empresas de capital público, que es una inversión que tienen que hacer los Estados de forma transitoria porque, por ejemplo, Airbus vale ahora dos tercios menos de lo que valía hace uno año”, dijo Jiménez.
Por su parte, Fedeme rechazó la huelga porque es una “fórmula que no tiene sentido” y depositaron sus esperanzas en la mesa sectorial que el Gobierno celebrará en los próximos días.
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