El Juzgado de Instrucción número 18 de Sevilla ha ordenado la búsqueda y captura de cinco personas, supuestamente miembros de la red criminal dedicada a robar partidas de hachís a otras bandas de narcotráfico en la provincia haciéndose pasar sus miembros por agentes de la autoridad, una organización que ha sido recientemente desmantelada por la Guardia Civil tras la detención de 17 personas y la incautación de casi dos toneladas de la citada droga.
Según han confirmado a Europa Press fuentes de la investigación, la orden ha sido decretada para detener a cinco personas más, entre las que se encuentra uno de los líderes de la organización, en el marco de la operación 'Reñidero'.
La pasada semana la Guardia Civil informó sobre la desarticulación de esta red delictiva y de la detención de 17 integrantes del grupo --dos de ellos ya se encuentran en prisión-- por supuestos delitos de pertenencia a organización criminal, robo con violencia e intimidación y tenencia ilícita de armas, si bien a algunos de los miembros de la red se les atribuye un supuesto delito contra la seguridad vial por carecer de permiso de conducción.
La operación se inició tras el robo de una furgoneta de alquiler a punta de pistola momento en el que los agentes tuvieron dudas sobre la veracidad de la misma e iniciaron su búsqueda, encontrándola en un polígono industrial de La Rinconada (Sevilla). Tras diversas gestiones, identificaron además una finca cercana donde podría haber estado el vehículo antes del lugar donde fue descubierto.
Los investigadores, en ese sentido, sospechaban de que el mismo pudiese haber sido usado en un transporte de estupefacientes, por lo que decidieron controlar la finca mencionada, observando en sus inmediaciones cómo dos vehículos salían de la misma con varios fardos de hachís en los respectivos maleteros.
Tras la autorización judicial correspondiente, los agentes registraron la finca en cuestión, donde encontraron ocultos bajo unas lonas más fardos de hachís, con un peso total de 1.950 kilos. Además, localizaron tres armas cortas, seis chalecos identificativos de la Guardia Civil y luces de prioridad policial. Por último, se incautaron de tres vehículos, uno de ellos sustraído y con placas dobladas también sustraídas, y se detuvo a dos hombres y una mujer.
REÑIDERO DE GALLOS
Además en la finca se encontraba lo que se conoce como un reñidero de gallos --de ahí el nombre de la operación--, instalaciones muy bien preparadas, donde además del lugar donde se realizan las peleas, había unos 200 gallos de raza, algunos de ellos premiados y por tanto de alto valor económico.
Durante la investigación, los agentes comprobaron que se trataba de un grupo dedicado a dar "vuelcos" a otras organizaciones delictivas haciéndose pasar por policías, de ahí que tuvieran en la finca material policial. Además, descubrieron que el núcleo de la red estaba ubicado en las barriadas de Padre Pío-Palmete.
Una vez que se localizó a los componentes de la organización y sus tareas dentro de ésta, se solicitó al Juzgado de Instrucción número 18 de Sevilla 16 entradas y registros en domicilios y naves en las localidades de Sevilla, Lebrija, Paradas, Marchena, Alcalá de Guadaíra y Dos Hermanas, resultando detenidos 14 integrantes más de la red, 46.000 euros intervenidos, así como abundante documentación y cuatro vehículos de alta gama.
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