Los ayuntamientos afectados por la intensa lluvia caída en la madrugada de ayer en la Sierra Sur de Sevilla abrirán oficinas para recoger los daños sufridos por parte de los vecinos, en un proceso que tendrá que estar terminado en un mes, para gestionar las ayudas directamente desde el Gobierno central.
Esta es la principal conclusión extraída de la reunión que, por espacio de tres horas, han mantenido los alcaldes de los quince pueblos más afectados de la provincia de Sevilla en la sede de la Delegación de Gobernación de la Junta en la capital sevillana, donde se ha acordado ubicar las citadas oficinas para que en ellas se recojan todos los daños.
El alcalde de La Roda de Andalucía, Fidel Romero, ha explicado a Efe al terminar la reunión que crear la oficina es algo necesario sobre todo “por el alto nivel burocrático y la dificultad que hay para rellenar la documentación necesaria”, de modo que se atenderá a los vecinos de forma individualizada para que esa documentación se rellene lo mejor posible.
Ha concretado que para acogerse al decreto de ayudas urgentes del Gobierno central es necesario que todo esté presentado antes del 22 de noviembre, “aunque posteriormente se modifique algo el papeleo, pero lo esencial tiene que estar presentado antes de un mes”.
Ha señalado que los vecinos podrán presentar “todo lo que entiendan que son daños por causa las riadas, y pedir las correspondientes ayudas”, indicando que se trata de “algo muy necesario, sobre todo porque esto nos ha venido en plena campaña -recogida de la aceituna- y los daños sin cuantiosos, tanto en particulares como en grandes plantaciones y empresas”.
Ha citado, además, que los daños se aprecian tanto en instalaciones de construcción como en caminos e infraestructuras, “que algunas han desaparecido”, y ha abogado por trabajar “para que el daño se restituya cuanto antes”.
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