Varias asociaciones y vecinos del Casco Norte se han unido para denunciar las medidas impuestas por el Ayuntamiento de Sevilla ante el problema de concentración de personas sin hogar en la plaza del Pumarejo. Entre las medidas adoptadas se encuentra la colocación de una patrulla permanente de la Policía Local en la plaza y la sustitución de parte de los bancos actuales por otros antiindigentes.
Colectivos como la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha), la Oficina de Derechos Sociales, la Asociación de Vecinos La Revuelta y Mujeres Supervivientes han mostrado su rechazo frente a la respuesta del Consistorio y reclaman que se paralicen las medidas adoptadas y se sustituyan por otras más favorables para estas personas.
Como explica Puri Huertas, portavoz de La Revuelta, “hace un mes varios vecinos denunciaron la falta de limpieza y los problemas de convivencia que había en la plaza del Pumarejo, algo que lleva ocurriendo desde hace años”. En respuesta a esta denuncia, el Ayuntamiento ha tomado estas medidas que la portavoz califica como “sorprendentes” y “desproporcionadas”. Además, considera que esta no es la solución para los vecinos, puesto que “las personas que antes dormían en la plaza ahora se han trasladado a calles colindantes”.
Según Puri Huertas, “los vecinos queremos que las calles estén limpias, pero también queremos que a las personas sin hogar se les dé una respuesta y una casa. Hay propuestas europeas, planes sociales y muchas otras medidas institucionales para estas personas” y añade que “nuestro problema no son los pobres sino la pobreza”.
Con respecto a la tala de árboles que se ha llevado a cabo en la plaza del Pumarejo y que ha suscitado cierta polémica entre los vecinos, Puri Huertas cree que se trata de otra medida contra las personas sin hogar y que “ahora ni los indigentes ni los vecinos podemos estar en la plaza debido al calor que hace en Sevilla. Esto nos ha hecho pensar que aquí ocurre algo”.
La portavoz ha reclamado que el Ayuntamiento convocara una reunión para tratar este tema y que no contara con su asociación, “convocaron aleatoriamente a algunos vecinos y les dijeron que iban a poner el patrullero y que realizarían alguna actuación social, pero aún no la hemos visto”. Por ello, pide que reciban a su asociación y que “quiten ya el coche de policía y contraten a educadores sociales que ayuden a estas personas”.
Antonia Ábalos, presidenta de Mujeres Supervivientes, señala que “estas políticas del Ayuntamiento de abandono y desafección nos parecen una traición”. Desde su colectivo atienden a mujeres en situación de exclusión social y explica que desde que se han tomado estas medidas, “veo a estas personas indigentes por las esquinas escondidos y temerosos” y destaca que “es una vergüenza que pase esto en una ciudad como Sevilla habiendo otros modelos de desarrollo para estas situaciones”.
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