La Asociación de Profesores de Instituto de Andalucía (APIA) ha anunciado que presentará una querella criminal contra el delegado territorial de Educación, Cultura y Deporte de la Junta andaluza en Sevilla, Francisco Díaz Morillo, por el caso de un alumno de cuarto curso de ESO del instituto 'Los Álamos', en Bormujos, que tras haber cerrado el curso con cinco asignaturas suspendidas logró graduarse en contra del criterio del claustro de profesores al prosperar parcialmente ante la comisión provincial de reclamaciones la impugnación de sus suspensos.
Así lo han subrayado a Europa Press fuentes del colectivo, que también han precisado que APIA promoverá la interposición de una queja ante la Fiscalía General del Estado por lo que consideran una "inacción" en este asunto de la Fiscalía de Sevilla, ente al que la asociación elevó actuaciones con la intención de que el Ministerio Público llevara a cabo diligencias tendentes a depurar responsabilidades.
Y es que APIA ha estimado la existencia "argumentos de peso suficiente" como para llevar a los tribunales el caso de este alumno, al que la administración educativa aprobó, a través de la comisión provincial de reclamaciones, dos de las materias que había suspendido; en concreto, Lengua Castellana y Literatura e Inglés.
La Consejería de Educación ya justificó este caso y otros similares --trascendió otro también en la provincia de Sevilla, en el colegio 'Aljarafe' de Mairena del Aljarafe-- en criterios meramente técnicos, haciendo hincapié en la cualidad de puntuales de los mismos y en la profesionalidad del cuerpo docente andaluz.
De otra parte, y en relación con este caso, APIA ya anunció la presentación de un requerimiento a la titular de la Consejería, Mar Moreno, con vistas a obtener "explicaciones" sobre instrucciones remitidas a algunos centros educativos en las que "se favorece otorgar titulaciones en junio con asignaturas suspensas" al término del cuarto curso de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO).
Desde la asociación se explicó a Europa Press que dichas instrucciones, "muy extrañas", eran siendo supuestamente enviadas por la Inspección educativa, y que, en cualquier caso, la asociación las considera "irregulares" al contradecir la propia normativa de la administración autonómica.
En estas premisas, "que no se envían a todos los institutos", se justificaba el aprobado en junio con asignaturas suspendidas, sin necesidad de agotar todas las convocatorias, razón por la que se reclama a Moreno una explicación sobre el hecho de que "se contradigan las propias normas de la Junta".
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