La portavoz adjunta de Izquierda Unida en el Ayuntamiento hispalense, Josefa Medrano, advirtió ayer de “los nefastos efectos que la privatización de Mercasevilla podría conllevar” para la población, en términos de control sanitario, y ha expresado su inquietud ante la posibilidad de que los problemas de seguridad alimentaria detectados recientemente en el matadero de la ciudad, y que incluso han acarreado su cierre provisional por parte del Consistorio, terminen extendiéndose en el futuro a la lonja de pescado.
Así, Medrano se mostró convencida de que la liberalización de los reglamentos de Mercasevilla, además de suponer el despido de más de un centenar de trabajadores, implicará también un empeoramiento de la calidad del servicio y afectará negativamente a la inspección que se venía aplicando para garantizar el abastecimiento.
Por su parte, el concejal delegado de Empleo y presidente de Mercasevilla, Gregorio Serrano respondió que las incidencias detectadas en el matadero de Mercasevilla “no tienen nada que ver con su carácter privado, ya que la inspección veterinaria está garantizada por el Ayuntamiento”. Serrano avisa de que IU-CA está manipulando este asunto para “mezclar cuestiones que no tienen nada que ver”.