Antonio L. G, el hombre de 48 años de edad que fue detenido por la Policía Nacional en la mañana del lunes como presunto autor de la muerte de su esposa, que fue hallada degollada en el suelo de la vivienda que ambos compartían en la localidad sevillana de Écija, fue ayer dado de alta tras ser ingresado en el hospital después de consumir varias pastillas de trankimazín.
En este sentido, fuentes policiales informaron de que, tras ser dado de alta, el hombre detenido pasó a dependencias policiales en espera de prestar declaración, lo que se producirá, como muy tarde, durante la mañana de este miércoles. Según las fuentes consultadas, una vez que la Policía tome declaración al detenido -hasta el momento no ha podido hacerlo al encontrarse bajo el síndrome de abstinencia-, éste pasará en la mañana de hoy a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Écija, encargado del caso.
En tanto, la víctima, P. M. M, recibió sepultura ayer tras una misa funeral celebrada a las 18.30 horas en la parroquia de Iglesia Mayor de Santa Cruz. Además, la Corporación municipal astigitana y la ciudadanía de Écija celebraron ayer una nueva concentración en la plaza del Salón como muestra de repulsa al crimen. Carlos Onetti, concejal de Seguridad Ciudadana de Écija, informó de que tras la primera concentración celebrada, la Corporación municipal y los vecinos de Écija realizaron un nuevo acto, a las 12.00 horas y de nuevo en la plaza del Salón, al objeto de condenar el terrible crimen y rendir homenaje a la víctima. “Hemos leído un manifiesto y durante el pleno ordinario del próximo jueves guardaremos un minuto de silencio”, manifestó.
Por otro lado, varias administraciones como el Gobierno, la Junta y la Diputación, condenaron el suceso.
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