Tras cuatro años de espera y 120 millones de euros invertidos, el doble de lo presupuestado, Sevilla comenzará hoy a disfrutar de su ampliación del Palacio de Exposiciones y Congresos (Fibes), con 45.000 metros cuadrados dominados por la luz natural, con el que se pretende convertir la ciudad en la tercera en importancia a nivel congresual. De hecho, dos personas se dedican desde hace tres meses en Madrid y Bélgica a conseguir ese objetivo, aunque “las conexiones aéreas”, especialmente con Londres y Amsterdam, son las que más preocupan.
La inauguración oficial tendrá que esperar, pero su apertura al público será hoy gracias a la Bienal de Flamenco y a su homenaje a Camarón. Ayer la visitaban el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido; los gerentes de Fibes, Gaspar Sáez, y Emvisesa, Miguel Contreras, y el arquitecto que ha dirigido la obra, Guillermo Vázquez Consuegra, que aseguraba que se ha construido “sin un mínimo asomo de despilfarro económico o deriva presupuestaria, donde toda la inversión realizada se encuentra en este espacio”.
A pesar de todo, la ampliación de Fibes ha costado el doble de lo presupuestado y ha tardado cuatro años en finalizarse, tras sortear dificultades de toda índole. El coste total del edificio, adjudicado por 66,1 millones, ronda los 120 millones, entre los que se encuentran 90,8 millones por la obra, 9,3 de honorarios administrativos y el IVA (entre el 18 y el 21%). De este montante, puesto en su práctica totalidad por el Ayuntamiento y Emvisesa, 16,8 millones han sido subvencionados por la Junta de Andalucía, mientras que 2,5 han sido comprometidos por la Diputación de Sevilla, de los que aún adeuda 900.000 euros, según Miguel Contreras. Además, la parcela colindante de suelos terciarios cuenta con una concesión demanial a 75 años, por lo que se analizan “posibles interesados como un hotel o un centro de salud”.
Congresos y cultura
Aun así, lo que preocupa ahora es el futuro, trabajar en situar a Sevilla como la tercera ciudad a nivel congresual en los próximos años, más aún cuando sólo las seis ferias cerradas para 2012 conseguirán un impacto económico de 27 millones de euros. Según el gerente de Fibes, Gaspar Sáez, el objetivo es situar a Sevilla en la tercera ciudad española en el ranking congresual, colocándose en el puesto 70 a nivel internacional desde el 140 que ocupaba.
Para ello, hace tres meses se contrató a una persona que trabaja en Madrid para atraer ferias y congresos, mientras que otra concentra sus esfuerzos en Bélgica, con Europa en el punto de mira. Aunque Sevilla cuenta con excelentes conexiones, fallan “las aéreas”, por lo que se están trabajando con Iberia para mejorara las comunicaciones con Londres y Amsterdam.
El segundo pilar del nuevo Fibes será la atracción de espectáculos culturales al auditorio, “acercando Fibes a la ciudad”, convirtiendo Sevilla en eje cultural de su entorno.
La capacidad del auditorio es de 3.557 personas
La ampliación de Fibes ha conseguido incluir en su espacio un auditorio negro y plata, cuyo techo es una inmensa lámpara escalonada, y que cuenta con una capacidad para 3.557 personas, constituyéndose como uno de los más grande de España si no el que más. A este espacio se suma una zona expositiva para 2.500 personas o 20 salones polivalentes, con un vestíbulo para exposiciones de 700 metros cuadrados y una zona de restauración para 2.000 personas.
La estructura cuenta con un aparcamiento subterráneo de 25.000 metros cuadrados para 900 vehículos, de cinco plantas y sin pilares, con luz natural y ventilación a través de un patio, disponiendo también de 15.000 metros cuadrados de viario público y 20.000 metros cuadrados de urbanización.
Zoido, claridad sobre CCOO y UGT
El alcalde de Sevilla ha pedido que “se esclarezca cuanto antes” si los sindicatos UGT y CCOO cobraron ayudas por actos que finalmente no realizaron en Fibes, tal y como está investigando la Policía Judicial de Sevilla, hecho que desconocía Zoido.
“Desdibujado entre lo privado y lo público”
Guillermo Vázquez Consuegra ha definido el edificio con forma de 'L' como “autónomo y contextualista, con bordes desdibujados entre lo privado y lo público” y con una “gran versatilidad”.
“Es un proyecto para esta ciudad y este espacio, que perdería su significado y razón de ser si se desarrollara en otro sitio, ya que este auditorio ha tomado posesión del lugar donde se encuentra”, subraya Vázquez Consuegra, que apunta a una arquitectura “comprometida con los valores cívicos y alejada de las modas y también de todos los excesos”.
Para su desarrollo se han utilizado “pocos y buenos” materiales, empleando en distintas ocasiones un mismo producto con distintos acabados, como es el caso de la piedra denominada filita. Entre los materiales utilizados, ha mencionado también el aluminio, que reviste el auditorio en su práctica totalidad, el acero para la estructura y el hormigón visto blanco. El auditorio se completa con una gran lámpara de polietileno, maleable y con “gran capacidad de absorción del sonido”.
Ha subrayado el valor de la luz como “el material más importante de construcción para un arquitecto”, una luz natural que invade el nuevo auditorio en todos sus planos y que aporta “una escala más humana a la edificación”.
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