Vuelven los
impagos a
Smart Servicios Avanzados. La
subcontrata de
Ayesa vuelve a ser
objeto de denuncia por parte del sindicato ASC, que alerta de que esta compañía
no paga a su plantilla desde el mes de
abril, un extremo que ya ocurrió a
principios de año y que el sindicato vincula a la intención de la empresa de
integrarlos en Ayesa pero si la plantilla
renuncia a su antigüedad, ya que la mayoría superan los
diez años de prestación de servicios a la multinacional de consultoría e ingeniería.
Así, según ha denunciado el sindicato Alternativa Sindical de Clase,
ASC, Smart Servicios Avanzados, una subcontrata creada por Ayesa para “
precarizar las condiciones de trabajo de la plantilla de las empresas del grupo”,
no ha abonado a su plantilla la nómina de abril, recordando que los trabajadores “llevan cobrando tarde y mal desde el pasado verano”, como ocurrió con los
impagos que ya denunciaron en enero y febrero y de los que se hizo eco
Viva Sevilla.
Para ASC, estas
demoras en el pago de las nóminas representan la “
fórmula” que tanto Ayesa como Smart Servicios Avanzados, que recuerdan que el dueño “es el mismo que el de
Activa ETT, también empleada por Ayesa” utilizan para “
presionar el paso de unos 20 trabajadores de Smart a Ayesa, concretamente a
Atech BPO, de tal modo que éstos
renuncien a su antigüedad, que oscila entre los 13 y los 20 años”.
Según denuncia el sindicato, el planteamiento de Ayesa es que “los trabajadores renuncien a su antigüedad,
pidan la baja voluntaria de Smart Servicios Integrados para, posteriormente,
integrarlos en Ayesa perdiendo íntegramente los complementos salariales por su antigüedad y sus
derechos”.
Ante la
negativa de los trabajadores, la respuesta de las dos empresas, según denuncian, es “
presionarlos con la demora y los impagos de sus nóminas, buscando que renuncien a su antigüedad, por la vía de la asfixia económica, al no pagar puntualmente sus salarios y que sean ellos los que renuncien a su puesto”.
ASC critica que
tras la “fanfarria” de la que se rodea Ayesa, con la compra de empresas y el crecimiento de beneficios y cifra de negocio, lo que hay es “la
explotación más descarnada” y la “
violencia” al no abonar las nóminas, una “
desfachatez y una desvergüenza enorme cuando juega con la salud psicológica de las trabajadoras y los trabajadores y las necesidades básicas de sus familias”.
Desde ASC han exigido el “inmediato pago de la nómina de abril” a todos los trabajadores de Smart, como ya hizo a mediados de marzo con las anteriores impagadas, y que
Ayesa “asuma su responsabilidad,
asumiendo en su plantilla a todos los trabajadores y trabajadoras, reconociendo su antigüedad y sus condiciones laborales,
terminando así con una situación de cesión ilegal y de atropello infame a unos trabajadores que llevan toda su vida trabajando para Ayesa”.
Cuando se produjo el último impago, correspondiente a enero y febrero, ASC apuntaba que su
intención era hacer una
“denuncia pública” pero que no descartaba iniciar una
campaña de movilizaciones y protestas, como las que ya protagonizaron a finales de año, y que coincidieron con la
huelga que también convocó UGT, contra la
política laboral de la empresa al despedir a los trabajadores de más antigüedad y
negarles cualquier tipo de reciclaje interno ante programas y proyectos que quedaban obsoletos.