La mina de
Aznalcóllar (Sevilla) no volverá a abrir su explotación al menos hasta 2027, debido a que todavía está pendiente de recibir dos permisos de explotación y tiene que realizar una serie de obras en las instalaciones mineras que durarán al menos tres años desde que se inicien.
Así lo han explicado a EFE fuentes de Minera los Frailes (MLF), la compañía titular de los derechos mineros adjudicados en el concurso internacional de Aznalcóllar, que han indicado que en estos momentos están a la espera de recibir la Autorización
Ambiental Unificada (AAU) por parte de la Junta de Andalucía, y "tras recibir el Dictamen Ambiental Favorable, la tramitación, tras seis años de proceso detallado y minucioso, está en su fase final".
Una vez recibida la autorización se estaría a la espera del visto bueno por parte de la Consejería de Industria, Energía y Minas, y comenzarían las obras necesarias para sacar adelante todo "el proyecto industrial asociado a la explotación de la mina", en el que se encuentra "el proyecto hídrico", en el que se incluye "la depuradora de última generación y la planta de tratamiento".
Sin fecha aún del inicio de las obras, la construcción del proyecto industrial durará tres años "y una vez transcurridos comenzaría a iniciarse la extracción de mineral", para lo que MLF no puede precisar una fecha, aunque si los permisos se concediesen durante 2024 las obras se iniciarían de inmediato y la primera voladura de mineral se realizaría tres años después, durante 2027.
"El objetivo de la compañía es que sea cuanto antes", terminan las mismas fuentes de la empresa, que tiene previsto invertir unos 450 millones de euros, de los que 100 están destinados a una estación depuradora de agua de última generación, "que se une a la promoción de una nueva red de infraestructuras para la gestión hídrica del proyecto", como informó la pasada semana en un comunicado.
Con ello, "resolverá definitivamente el problema generado por los pasivos ambientales heredados de la antigua operación minera", aunque diversos grupos ecologistas han presentado alegaciones contra el proyecto por conllevar vertidos de aguas procedentes de la actividad minera hacia el Guadalquivir.
Minera Los Frailes es propiedad de Grupo México (97,31 %), y Magtel (2.69 %), y pretende trabajar en el yacimiento polimetálico de Aznalcóllar con reservas de zinc, cobre, plomo y plata.
Se prevé que durante unos 30 años cree más de 1.000 empleos directos e indirectos en la explotación minera.