"Necesitamos algo que nos compense del desequilibrio en el que nos hemos metido a través de la civilización tecnológica", opina el actor y dramaturgo cordobés Rafael Álvarez 'El Brujo', que ha retomado su adaptación teatral de la obra 'Autobiografía de un yogui' en un contexto de "hambre de mística y alma".

A los pies del escenario del sevillano Teatro Pathé, elegido para este reestreno y al que regresará los días 2, 3, 4 y 6 de abril, El Brujo detalla a EFE los pormenores de la vuelta a escena, siete años después, de una representación basada en el libro del mismo nombre escrito en 1946 por Paramahansa Yogananda, el precursor del yoga en occidente.

"Esta obra no acaba nunca de ser contemporánea, tiene una vigencia universal en el tiempo y en el espacio, habla de verdades eternas", asegura el actor, que adapta las palabras de "un místico indio que explora la religión con una mentalidad científica" y que, a través del kriya yoga y la respiración, introdujo técnicas que "pasaron del secretismo de un ashram en los Himalaya al hombre corriente occidental que se levanta corriendo por la mañana y vuelve a casa por la noche completamente agotado sin saber por qué va así".

Durante casi dos horas de monólogo, solo acompañado por la música del sitar -instrumento tradicional de India- a manos de Javier Alentano, El Brujo desgrana la vida de Yogananda y lo hace citando desde Shakespeare a Einstein pasando por la reina Letizia, en una interpretación llena de humor que comienza advirtiendo al público: "Esta es una obra rara y larga".

"Es un andaluz hablando de un yogui de la India, con un sitar indio y notas indias, pero hablando en andaluz sobre la meditación y el yoga", resume el dramaturgo cordobés, que reconoce que llevar a las tablas esta obra ha sido un proceso "complejo y muy laborioso", a la vez que "muy interesante y fascinante".

La meditación como laboratorio

Confiesa su sorpresa ante el éxito de la 'Autobiografía de un yogui' en su primera etapa, con teatros llenos por ejemplo en Madrid durante semanas cuando todo hacía pensar que era "la obra más difícil y menos comercial", lo que demuestra que "la gente quiere saber".

A su juicio, está habiendo una expansión de estas enseñanzas y de la técnica de la meditación en una época "muy complicada" en la que la vida está "totalmente mediatizada" por la tecnología, el uso de móviles, ordenadores y redes sociales, lo que lleva al ser humano a experimentar "un día a día con mucho estrés".

Advierte además que esta situación va a continuar: "Lo más grande está por venir, que es la inteligencia artificial. Cuando entre en la vida diaria va a producir un cambio muy gordo y mucha gente no estamos resistiendo a nivel psíquico ese tremendo cambio", asegura.

"Se resiente la mente, se resienten los nervios. Es un estrés muy profundo, porque no es debido a la hiperactividad, sino a los límites de la identidad", sostiene El Brujo, que cree que "eso hace que haya un hambre importante de mística, de yoga, de meditación y de saber acerca de una palabra muy olvidada pero que está ahí, en la filosofía y en la tradición de occidente, y en la literatura y la poesía, que es ALMA".

Con la intención de divulgar la vida de Yogananda, el actor sostiene que "la meditación es el laboratorio donde se hacen los experimentos que verifican la verdad o la falsedad de las hipótesis religiosas" y considera que puede haber quien no se acerque a ella por desconocimiento o por creer que no va a saber hacerlo. "La meditación es respirar, solo que es respirar de manera consciente, con atención", proclama.

El cambio no viene de la política

El Brujo se muestra completamente convencido de que el cambio de la sociedad hacia una vida mejor colectivamente "no viene de la política, que está evidenciando que no es un instrumento idóneo, porque se hace sin fundamento filosófico, ético y sin una conexión con la espiritualidad".

"La política es un instrumento a través del cual se afrontan y gestionan los problemas sociales, no tiene más misterio", reflexiona el actor, que lamenta sin embargo que "se reduzca solo a un instrumento en función de un grupo de intereses, de un bando que comparte una ideología, y no hay nada más acientífico que una ideología", que además "siempre es partidaria".

Defiende que "esto no es de ahora, de la etapa de Pedro Sánchez o de Núñez Feijóo, esto es del Pleistoceno" y argumenta que los cambios vienen "una vez que te das cuenta de que tu forma de ver el mundo no es correcta, algo que solo se aprende dándose de cabezazos contra algo, y a veces ni siquiera así", resume.

"La humanidad avanza de forma continua, y en ese avance hay muchos que caen y otros que se iluminan", sentencia el artista, que vuelve a la vida de Yogananda para considerarla "prodigiosa" y añade que su autobiografía habla de "un auténtico yogui que ha experimentado hasta lo más profundo las técnicas de meditación y que las cuenta por sí mismo para la humanidad".

Ahí está, según El Brujo, el "valor" de este libro con "una fuerza impresionante", traducido a 60 idiomas y que compara con la Biblia en su "gran proyección", que cree que con el tiempo será mayor aún. "Tal vez estemos hablando, ahora aquí, de un libro que va a ser un clásico dentro de cinco o seis siglos".